Continuando la brecha abierta por su muestra personal en la Akira Ikeda Gallery (de Berlín, Noviembre de 2006), el artista tejano-mexicano Ray Smith, afincado en New York, en esta muestra apuesta por el Dibujo.

En estas obras, el artista ha experimentado una oscilación formalista y juguetona donde retoma las veleidades de la velocidad y la gracia del sentido del humor para desvelar su maestría; así como recurre a una mitología personal que ha ido engrandeciendo a partir de la recuperación de un imaginario teatral, narrativo y circense, donde lo doméstico es violentado por la fantasía heroica, y la fantasía heroica es violentada por la impronta del deseo, el erotismo, el frenesí de la belleza atacada por el grotesco gesto de la fealdad, como burla evidente del tiránico canon occidental. Reinventándose una vez más, he aquí a un Ray Smith que aboga por la crueldad de la verdad antes ... que por la falacia del engaño fascinante, un Ray Smith, que en plena decadencia de un tiempo de crisis generalizada de valores (ético-estéticos y financieros) opta por desvelar sus 'malos sueños', sus utopías frustradas, desmontando el concepto de 'sueño' (americano... o no) como 'ideal paradigmático del ser', porque sus 'buenos sueños', sólo son suyos; y nunca sabremos cómo arrebatárselos'