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Para el debut de Jiang Zhi en España e inauguración del nuevo espacio, Magee Art Gallery (Madrid) presenta bajo el título Temblar, dos obras de este joven artista chino que cuestionan la identidad del sujeto en la sociedad contemporánea y reflexionan sobre lo 'anti-natural' de su desconcertante existencia. Dos trabajos en los que el cuerpo humano se estremece ante las manipulaciones del entorno y se somete a mutaciones controladas, y mediante los que Jiang Zhi nos alerta de la inseguridad, la inestabilidad, la imprecisión y la indefinición a los que el ser contemporáneo se expone tanto por su condición de individuo como de animal social. Son, en definitiva, dos grandes obras del nuevo arte contemporáneo chino, que nos estremecen por el simple hecho de hacernos despertar a nuestro mundo actual, a nuestra ... propia realidad.

La carrera de Jiang Zhi comienza con el desarrollo del arte experimental de los 90 como telón de fondo y durante el comienzo de una serie de grandes transformaciones sociales en China, tales como cambios de orientación en política, nuevas tendencias económicas y la consecuente reforma del panorama cultural. Este momento coincide con el nacimiento del arte contemporáneo chino (conocido como el 85´New Wave), el cual tiene que enfrentarse a dos cuestiones: primera, ¿cuáles son las problemáticas que se derivan de esta nueva situación cultural? y segunda, ¿cómo presentamos/ representamos estas nuevas problemáticas?

Desde sus primeras novelas experimentales en la Academia de Bellas Artes de Zhejiang, foco principal del '85 New Wave, hasta su implicación posterior en el videoarte, sus experiencias le han llevado a una exigencia consciente hacia el lenguaje y a unas ciertas expectativas por las estructuras lingüísticas. Como resultado, sus obras son muy poéticas. Por otro lado, su carrera periodística desde el 1995 al 2005 hizo que viviese las transformaciones sociales en primera línea, forzándolo a enfrentarse al asalto continuo de nuevas experiencias sin procesar. Estos dos factores confluyen en el posicionamiento del artista en la intersección entre la poética y la sociología, tejiendo fervientemente experiencias sociales mundanas en sus obras, pero al mismo tiempo manteniendo la tensión entre nuestra experiencia cotidiana y la de la observación de la obra de arte.