El arte no es una excepción y la crisis está trayendo -al margen de los inevitables cierres- la apertura de espacios expositivos donde se venden "pequeñas obras" a precios de regalo de gran almacén. Es el caso de la recién abiertas en Madrid CaprileFoto y Fast Cool. La primera, que dispone también de galería virtual, es una iniciativa del fotógrafo Pascuale Caprile y trata de promover el coleccionismo de fotografía de autor en pequeño formato, sin renunciar, claro está, a la venta de obra de mayor tamaño. La segunda, ubicada en un espacio del Barrio de las Letras donde también se venden otros muchos objetos, cuelga de sus paredes exposiciones temporales de artistas noveles.

También en las últimas semanas se ha lanzado TruecArte como "un nuevo camino de difusión del arte basado en el sistema del trueque, sin dinero por medio", que incluye a artistas dispuestos a canjear alguna de sus obras por cualquier otro servicio que el interesado en la misma pueda ofrecer. Son, desde luego, fórmulas de respuesta a la crisis como la que acaba de poner en marcha el avispado artista británico Damien Hirst, que anuncia ya la apertura de la segunda tienda "Other Criteria", donde vende "arte asequible", objetos artísticos de él y otros creadores por precios a partir de 3,5 libras en el caso de llaveros. Cifras, en todo caso, bien alejadas de los precios obtenidos en su ya famosa subasta londinense de septiembre pasado. ARTEINFORMADO