La exposición 17 obras sin título, quiere mostrar no sólo sus trabajos recientes, sino también algunos de épocas anteriores que ayudan a comprender el particular trasfondo de su poética y la coherencia de su trayectoria. Se trata de un artista que todavía hay que dar a conocer, y por su interés y vigencia, nos parece imprescindible mostrar algunas de sus obras anteriores. La obra de Joan Furriols es difícil de clasificar en una disciplina concreta, pero desde sus inicios, responde a sus planteamientos estéticos y conceptuales. Constituye una reflexión continua sobre el espacio y sus límites, sobre el tiempo y su transcurso. Todo ello a través de uno de los ejes sobre el que gira su trabajo: el orden, entendido como la disposición de los elementos que configuran la obra. Su proceso de investigación, le lleva a perforar planchas de hierro, a realizar incisiones sobre madera, a doblar papeles de...diferentes calidades. El resultado, siempre es un espacio transfigurado, que tanto puede parecernos real, como metafísico. En sus obras objetuales, construidas como si de naturalezas muertas se tratasen, Furriols otorga una nueva vida a los objetos, que más allá de la pura obviedad, se vuelven profundamente enigmáticos.
El conjunto de la obra de Furriols es de una naturaleza frágil e íntima, fruto quizás, de su trabajo silencioso y solitario. Su poética transmite una grave austeridad, no exenta de transcendencia. En muchos aspectos, se podría relacionar con el minimalismo, el espacialismo o el esencialismo poético. Recientemente, se ha podido ver en tres exposiciones retrospectivas: Joan Furriols. Pensar con el espacio, organizada por diversas entidades de Vic (Barcelona) en el año 2007, Joan Furriols. El lugar del tiempo, Centre d’Art Tecla Sala, Hospitalet de Llobregat (Barcelona) 2010, y El sentido del vacío, Museo de Montserrat, (Barcelona) 2013.
Imágenes de la Exposición
Sin título, 2015
Entrada actualizada el el 16 may de 2016
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