El nuevo trabajo de Manuel Barbero está inspirado en diversas reflexiones en torno a las difusas fronteras entre lo caótico y lo ordenado. Las obras que presenta forman un conjunto de probabilidades de caos que se equilibra con un conjunto de probabilidades de orden. Vamos y venimos sobre lo caótico y cuando parece estar ya todo ordenado se desordena con un simple volver a mirar. En el fondo, ese es el juego que el artista se ha impuesto, el del equilibrista, que tan pronto parece que cae hacia un lado como parece que cae hacia el otro. Es, precisamente, esa tensión a la que está sometido el equilibrista la que le permite, no sólo ir y venir, también disfrutar del riesgo asociado a una posible caída. La búsqueda que propone Manuel Barbero, más allá de otras conceptualizaciones, ha consistido en poner orden en el caos tanto como en desordenar, tratando...siempre de mantener el equilibrio y el desequilibrio, pues no se concibe un equilibrista sin ambas cosas.
Se pueden determinar tres momentos en la vida de Manuel Barbero -especialmente- en los que se ha cuestionado las difusas fronteras entre lo ordenado y lo caótico.
Entrada actualizada el el 26 may de 2016
¿Te gustaría añadir o modificar algo de este perfil?