El 26 de marzo de 2010 se inauguraron dos singulares proyectos artísticos urbanos en el céntrico barrio de la ciudad de Santander del Cabildo de Arriba, dos importantes intervenciones debidas a Baltazar Torres (Figueira de Castro Rodrigo, Portugal, 1961) y Concha García (Santander, Cantabria, 1960) y coproducidas por el Ayuntamiento de Santander y el Gobierno de Cantabria que el MAS dirigió y comisarió, y sitas en el emblemático e histórico sitio urbano santanderino conocido como la Rampa de Sotileza, en donde, todavía a finales del siglo XIX, las pequeñas embarcaciones, eran subidas a la Rampa al regreso de la pesca. Era un barrio de pescadores y el gran muro inicial con el que arranca era y es conocido como El Paredón, entonces muro de contención del mar. En todo se inspiró el novelista costumbrista cántabro José María de Pereda (Polanco, Cantabria, 1833-Santander, 1906) para escribir la novela ... Sotileza (1885) que da nombre a esta Rampa, bello canto de los tipos costumbristas del Santander marinero de finales del siglo XIX, en un promontorio que dominaba el mar y la bahía santanderina.

Concha García, se planteó una intervención artística en el denominado Paredón, con la traslación con la caligrafía autógrafa del padre de la artista de varios párrafos y frases de la novela Sotileza llevada a cabo en placas de composite de aluminio recortadas e incrustadas en el gran y emblemático muro de mampostería y sillarejo (Sotileza, 611 metros lineales de texto, desarrollo en los 221 m2 del muro, composite de aluminio recortado, 2010). El comisario destaca la total autonomía e independencia de ambos proyectos, poderosa y aparentemente antagónicos en cuanto a sus conceptos, idea y resoluciones, a la vez que plenamente articulados entre ellos y con el ámbito urbano. El de Concha García, 'posee un absoluto desarrollo orgánico, que sigue el serpenteante ritmo del Paredón, respetándolo armoniosamente, intervención de claro y evidente recuerdo urbano, grafitero, abstracto, monocromático -dotado de una espontánea variación de brillos y tramos mates, variaciones buscadas y encontradas que otorgan a la obra un curioso dinamismo-, de poderoso despliegue horizontal, poseyendo una intimidad en su ubicación y contemplación fundamentales'. El del portugués Baltasar Torres 'es totalmente antagónico, vertical -de diez metros de altura-, figurativo -tanto en los bajorrelieves de las olas doradas de su pedestal azul, como de la figura femenina que lo corona, la mujer de un pescador, con vestido rojo y un catalejo a través del cual la observa, inquieta, la llegada de las barcas-, pieza totémica de pensada presencia urbana de acuerdo a su perspectiva -bien visible desde la Plaza de las Estaciones, el Parque del Agua y la propia Rampa Sotileza- y de acuerdo a los distintos puntos de encuentro visual. El diálogo de ambas intervenciones artísticas es finalmente perfecto, porque funcionan conjuntamente de forma transversal, diálogo sincero y atemporal, tanto en el encuentro de conceptos pasados -desde ideas finiseculares peredianas-, como en su traslación, de total actualidad y hacia el futuro, propios del nuevo milenio' (S. Carretero). La propia Concha García ha comentado que la obra '...es un proyecto muy importante en mi trayectoria, por lo que supone. Sobre el papel, al principio teníamos algunas lógicas dudas respecto a materiales, formatos y alguna otra cuestión. Lo hemos ido estudiando a fondo y finalmente hemos conseguido nuestro propósito, superando todos los problemas y, a su vez, respetando el ámbito. Ha sido todo un reto y estoy especialmente contenta, ya que se integra en la esencia del lugar, su historia, su presente y su futuro. Estoy muy agradecida por todo el apoyo recibido'.

Esta exposición, presidida por la fotografía de Jesús Paniagua (Córdoba, 1963) (Sotileza, fotografía, 2011, 300x120 cm), es producto del proceso de ese trabajo artístico urbano, mostrándose ocho de las plantillas resultantes del recortado del texto que hoy se encuentra en el Paredón -a donde invitamos a acudir para su disfrute-, intervención artística de Concha García.