En el desarrollo del contexto cultural han habido transformaciones formales y estructurales en la manera de concebir, desarrollar y difundir los diversos proyectos de exhibición. Es por este motivo que tanto la planificación y diseño de una muestra como su recepción crítica, se convierten en herramientas fundamentales para dinamizar propuestas que se signifiquen en el contexto cultural con el cual están dialogando. Crear instancias de mediación entre los objetos culturales y las audiencias permite no solo crear plataformas de educación no formal, sino también impulsar una participación cultural a partir de los diversos ejercicios de identificación a partir de los bienes intangibles que componen nuestro acervo cultural.