Empezó su trayectoria de exposiciones el año 1985. A partir de ese momento su obra ha sido exhibida en las principales ciudades de nuestro país así como en Francia, Alemania, Reino Unido, Estados Unidos y México. También hay que destacar su participación en exposiciones colectivas y en concursos tanto dentro como fuera de nuestras fronteras. Ganador de prestigiosos premios de pintura, también encontramos obras suyas en museos como el Museo del Futbol Club Barcelona, el Museo Olímpico de Lausanne o en la Fundación Farrés Planella, entre otros.
Sus obras son fruto de una investigación de los materiales que utiliza y, especialmente, de la plasmación de una sensibilidad hacia el entorno de los sentimientos y estados anímicos que él o la modelo proyecta y que traslada a la tela. Nos encontramos ante un artista con una técnica propia. Un artista que pinta a base de sacar el empaste matérico. Como el escultor...que descubre la imagen inmersa dentro del bloque de piedra, él hace surgir la figura desde el magma inerte de la pintura que va sacando con disolvente de esencia de trementina empapada en trapos de algodón, que le sirven como papel de lija que desgasta la superficie haciendo aparecer manchas que incitan a la imaginación.
Domènech Sánchez es una persona honesta que explica la realidad que le rodea, la cual emerge de una neblina que es el misterio de la existencia. La figura femenina es para él el eje central de la inspiración, ya que cree en la mujer –esposa, madre, hija...- como expresión máxima de la creación y la sensibilidad humanas. Pero también atraen su atención las frutas sabrosas del placer, el paso del tiempo que lo cambia todo continuamente, los pensamientos que revolotean como pájaros, la ceguera que sufrimos respecto a tantas cosas, el reflejo de las personas en el espejo que confundimos frecuentemente con las personas mismas, el deseo de justicia simbolizado en una balanza, la búsqueda del refugio de un hogar amueblado, las partituras que aportan orden al sentimiento… El pintor busca dar a conocer la manifestación de la vida y el hecho espiritual que le acompaña, y lo consigue plenamente con unos cuadros de una fuerza que cautivan el corazón.
Imágenes de la Exposición
Domènech i Sánchez – Cortesía de la Sala Rusiñol
Entrada actualizada el el 08 mar de 2018
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