En esta ocasión, la propuesta curatorial no se basa en una interpretación iconográfica o en una línea histórica, si bien integra ambas estrategias; el objetivo de la exposición consiste en mostrar productos gráficos en cuya elaboración se cruzan la práctica artística de la estampa y el quehacer editorial.
El despliegue de los contenidos de la muestra, a través de las salas de exhibición, deja ver tanto la relevancia estética de la colección del museo, como el hecho de que se trata de materiales que son el resultado de complejos procesos de colaboración entre artistas, escritores, editores, impresores, talleres, instituciones, asociaciones y mecenas. La curaduría pone en evidencia una cuestión importante: que la producción gráfica es una industria por definición. En primer lugar, debido a su carácter de creadora de imágenes en serie; en segundo lugar, dada su relación natural con la práctica editorial surgida, históricamente, con...la aparición de la imprenta.
Entonces, el espectador descubrirá que el tipo de conocimiento que provee el saber gráfico es de carácter multidisciplinario al interior de lo moderno y de lo contemporáneo. Es decir, que la colaboración entre los distintos agentes artísticos, editoriales y de gestión cultural hace del aspecto industrial del medio un logro. En otras palabras, esto significa que si la edición gráfica convencional, a partir de una matriz o placa de un artista, multiplica y distribuye su originalidad al generar una imagen en serie, en otro nivel de producción, una carpeta facsimilar o conmemorativa diluye la diferencia entre la propia condición de originalidad de la primera versión y la reproducción posterior de la serie. Por esta razón, la curaduría combinó piezas del acervo artístico del museo con ediciones de su acervo documental.
En distintos momentos de la exposición se pueden revisar desde piezas muy raras, como algunas carpetas facsimilares o conmemorativas, hasta ediciones de compendios o portafolios de culto, como las obras Grabados originales de Manuel Manilla (1971), publicada por Ediciones Vanegas Arroyo; Fisonomías de Animales, de Erasto Cortés Juárez; Paisajes, de Vlady, por Tiempo Extra Editores; Estampas del Popol Vuh (1943), de Carlos Mérida, por Graphic Art Publications; Incidentes melódicos del Mundo Irracional (1944), de Juan de la Cabada y Leopoldo Méndez, editado por la editorial del Taller de Gráfica Popular, La Estampa Mexicana; Diferencia y Continuidad (1982), de Manuel Felguérez y Juan García Ponce, por Ediciones Multiarte; y Franz Kafka. Informe para una academia (2005), de Francisco Toledo, por Galería Juan Martín.
Ediciones y coediciones hace memoria de todas aquellas confluencias entre visionarios fundacionales y recupera los logros de proyectos vigentes. Nos hace pensar en otros encuentros que tuvieron lugar desde el paso del siglo XIX al XX, como fueron las colaboraciones entre artistas de la talla de Manilla o José Guadalupe Posada con editores o escritores como Antonio Vanegas Arroyo, Heriberto Frías o Ireneo Paz. También la muestra visibiliza, para el público de hoy, los modelos de producción que se verificaron en el pasado y que suceden actualmente en múltiples talleres y organizaciones como el Taller de Gráfica Popular, la Sociedad Mexicana de Grabadores, La Ceiba Gráfica, La Curtiduría, entre muchos otros.
Además, la selección expuesta considera algunos tirajes de libro-objeto o libro de artista, que es un subsistema gráfico de importancia capital en el contexto de la producción artística contemporánea. Ahí están las ediciones Un viaje en zeppelin (1988), de Yani Pecanins, y una edición litográfica de Per Anderson, como ejemplos relevantes. Incluso, hay una sección dedicada a la serie de libros Artistas en México, del Taller Gráfica Bordes, que reúne cuarenta títulos monográficos y bilingües, publicados en el periodo 2006-2013. En este caso, la selección tuvo pleno sentido curatorial por el hecho de que el lanzamiento de cada libro fue acompañado de un grabado original de los respectivos artistas.
Así, la muestra Ediciones y coediciones presenta distintas líneas de producción que permiten comprender la histórica, estrecha y vigente relación que guarda la disciplina del arte gráfico con la creación editorial.
Entrada actualizada el el 10 oct de 2017
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