Como un artista único en la escena del arte contemporáneo en China, Liang Shaoji explora el impacto de la vida y la humanidad en la sociedad y la cultura, mediante la creación de una interacción única entre el hombre y la naturaleza.

Totalmente dedicado al arte, este gran maestro ha participado en la Bienal de Venecia (1999), la Bienal de Estambul (1999) y la Bienal de Shanghai (2000, 2006). Ganador del premio Príncipe Claus Awards en 2010, tanto por sus obras, que capturan vívidamente la unidad entre la naturaleza y la humanidad encarnada en la cultura tradicional china; como por su calidad como artista que, indiferente a la fama y a la riqueza, se ha comprometido de todo corazón con la práctica del arte, explorando con mucho esfuerzo la conexión hombre - naturaleza.

En esta exposición se presentan ocho piezas de las obras de La Serie Naturaleza en forma de instalaciones y de vídeo utilizando materiales frescos como: gusanos de seda, capullos e hilos de seda, construyendo un delicado contexto para la contemplación acerca de la vida, el tiempo y los cambios sutiles inherentes a la cultura tradicional. La Serie Naturaleza que empezó en el año 1989, es una acertada interpretación del concepto de 'ciclo de la vida' en la cultura tradicional china. Refleja su preocupación por la naturaleza y la meditación para su comprensión.

Su esfuerzo incansable lo lleva a estar un paso por delante en el arte y en la vida, aproximándose así a su condición crítica de constante cambio. En su obra estamos siempre a la espera de una representación singular y revolucionaria; cuando todo lo que existe está representado en su mínima y máxima expresión, cuando la definición establecida, el concepto, la comprensión, la lógica junto al sistema de conocimiento establecido tienen que ser destruidos y cambiados para dar paso a una nueva estructura.

Lo singular crea un nuevo espacio que se generará de la nada. Con 'Preguntas al cielo', nuestra mente inquisitiva comenzará a trabajar en la búsqueda de más posibilidades.

Estas obras de Liang Shaoji tienen la intención de recordarnos que la ciencia no es el último recurso a la crisis y tenemos que recurrir a nuestra estética. En otras palabras, reflexionar sobre la relación entre nuestra percepción y la naturaleza. La estética tiene que ver nada más y nada menos que con la búsqueda de un punto de partida para hacer frente a la naturaleza y el medio ambiente.