La Fundación Francisco Godia de Barcelona acoge, del 5 de diciembre al 2 de febrero de 2015, la muestra "El Greco. La mirada de Rusiñol", que sirve de colofón a los actos del IV Centenario de la muerte de "El Greco", que se han celebrado a lo largo del 2014, bajo el paraguas de la Fundación El Greco 2014, cuyo director, Jesús Carrobles, durante su presentación, en el día de ayer, manifestó "que la Fundación está muy orgullosa de que el año Greco finalice en Barcelona, sin cuya visión catalana posiblemente el Greco no sería el Greco".

Y es que la muestra, co-comisariada por Vinyet Panyella (Sitges, Barcelona, 1954), biógrafa de Santiago Rusiñol y directora del Consorci del Patrimoni de Sitges, y Nadia Hernández (Barcelona, 1963), ex-directora de la Fundación Godia, explica el descubrimiento y la fascinación de Santiago Rusiñol (Barcelona, 1861 - Aranjuez, Madrid, 1931) por Doménikos Theotokópulos 'El Grego' (Candía, Creta, 1541 - Toledo, 1614), y la influencia que tuvo sobre la trayectoria del artista catalán.

Además, recuerda que a finales del siglo XIX Rusiñol "hizo un precedente y un modelo, al llevar a cabo una tarea de divulgación y proselitismo y convirtió la pintura de El Greco en el punto de partida de una nueva manera de entender la creación, como una manifestación del espíritu, frente al materialismo de la época industrial", según Panyella.

Se trata de una muestra única, que conjuga la investigación con la oportunidad de contemplar en Barcelona un conjunto que incluye obras de Greco de colecciones privadas que nunca se han visto en Barcelona, combinadas con obras modernistas y documentos. 

Según Panyella, la exposición también habla del coleccionismo: "Rusiñol descubrió el Greco en París, mediante su amigo Ignacio Zuloaga, y fue uno de los primeros coleccionistas. En los últimos años del siglo XIX adquirió 'Las lágrimas de San Pedro' y 'La Magdalena penitente con la cruz', que incorporó al Cau Ferrat de Sitges y esto potenció el coleccionismo del artista en Cataluña".

Por su parte, Nadia Hernández, la otra comisaria, comentó que "la exposición explica la visión que Rusiñol tuvo del Greco y las consecuencias que esto tuvo para el mundo artístico. Hemos intentado exponer obras de colecciones privadas, lamentablemente no son muchas, y también las de otros autores".

Entre las 40 obras que reúne la muestra están las obras de El Greco en Cataluña, procedentes de El Cau Ferrat, el Museu Nacional d'Art de Catalunya y de colecciones privadas, además aporta documentación y elementos para el estudio de la recepción y la interpretación de la obra del pintor.

Junto a una amplia selección de pinturas de Rusiñol, entre las que destacan 'La morfina' o 'Paroxismo del novicio', también se pueden contemplar obras de Laureà Valláis, Ramon Pichot, Ramon Casas, Francesc Labarta, Darío de Regoyos, Ignacio de Zuloaga y un dibujo de Picasso, 'Retrato de un desconocido al estilo de Greco' del Museo Picasso, "que ayuda a descubrir como Rusiñol hace de puente entre Greco y Picasso", según Vinyet Panyella.

La exposición está organizada por la Fundación Francisco Godia en colaboración con el  Consorci del Patrimoni de Sitges, la entidad que se encarga de preservar y difundir el legado de El Cau Ferrat, residencia de Santiago Rusiñol, un museo singular y uno de los principales núcleos del modernismo artístico y literario, que en fechas próximas reabrirá sus puertas tras acometer una profunda rehabilitación.

Este proyecto público-privado, financiado por Abertis, Fundación Mapfre y La Vanguardia, también cuenta con la colaboración de la Obra Social 'la Caixa', que programará la exposición  durante el  2015 en sus centros CaixaForum Palma y CaixaForum Zaragoza.