Ángel Ricardo Ríos suele descomponer la unidad espacial de sus obras, de la misma manera en que manipula la proporcionalidad de los elementos compositivos a distintas escalas, y para ello se vale del desplazamiento de los puntos focales de la composición, alejando o acercando a modo de zoom el elemento formal elegido: los volúmenes, el color, la luz. Sus trazos libres y precisos y una paleta cromática vibrante que desborda la composición acusan la procedencia del artista, la identidad que le define. La suya es una mirada cálida y sensual, a la vez que lúcida y certera.

El artista se siente cómodo en el gran formato; es capaz de apoderarse con soltura de todo el gran espacio en el que dispone sus obras, ya sea en la pintura o en la escultura. Su proyecto expositivo de inflables titulado 'Esculturas Nómadas' que presentó en el 2008 en el centro histórico de la capital mexicana es un buen ejemplo del domino de Ángel Ricardo de las grandes dimensiones en la plástica.

Su obra está signada por una innegable figuración, cargada de formas sensuales que preconizan su expresión tridimensional, sin embargo, en ellas se han gestado planteamientos decididamente abstraccionistas que ponen el énfasis en aspectos esencialmente formales, cromáticos y estructurales de la composición.

Las referencias a lo deseado por prohibido o reprimido, las lecturas de cierto contenido sexual atribuidas a la inclusión en sus trabajos de esa infinita yuxtaposición de 'Dildos', la carnalidad y confortabilidad que parecen proponer sus estructuras, invitan al espectador a ver algo más en sus obras, a descubrir esencias más allá de cojines o sofás, sin que para ello sean ya necesarias las afirmaciones del artista de que 'Esto no es una silla' o 'Esto no es un sofá'.

Ángel Ricardo Ríos es graduado del Instituto Superior de Arte de la Habana desde 1989. Sus primeras exposiciones individuales las realizó en La Habana en La Biblioteca Nacional y el Centro Provincial de Artes Plásticas y Diseño. Residiendo ya en México ha venido exhibiendo su obra en importantes galerías e instituciones latinoamericanas. En el 2009 participó en la Bienal de La Habana con su proyecto 'Esculturas Nómadas' presentado en la UNEAC de La Habana. Su obra ha sido reconocida con diferentes menciones y premios, entre los que destacan la reciente Mención Honorífica obtenida en la Cuarta Bienal de Artes Visuales de Yucatán (2009) o el Gran Premio OMNILIFE 01 del Salón de Octubre en Guadalajara, México, entre otros.