En esta nueva expedición Enrique Radigales parte de un universo digital con inevitables tintes autobiográficos. Un software de recuperación de datos se encarga de traer al presente archivos que previamente habían sido depositados en la papelera de su ordenador. El paso del tiempo ha corrompido diferentes imágenes, origen o fruto de su trabajo durante los últimos años. Una vez impresos sobre vinilo- material elegido por su perdurabilidad y por la relación que acontece con el propio discurso del artista- son tratados manualmente con disolvente. El nuevo gesto de borrado, esta vez analógico, difumina la rigidez de los procesos informáticos que han desgastado las imágenes y se complementan con otra huella del pintor: pinceladas d e acrílico sobre la impresión. Esta paleta, real, se solapa y contrapone a la paleta de colores virtual. Tal hecho es una síntesis de la problemática a la que se enfrenta Radigales tras ... haber estudiado Pintura y posteriormente Sistemas Interactivos y, es también, una de las mayores disyuntivas a las que se enfrenta el hombre contemporáneo en su relación con el mundo físico y el tecnológico.

En las obras de Radigales la fuerza del presentimiento está en proporción equiparable al recuerdo del pasado: la obsolescencia del legado tecnológico aventura una arqueología inminente de los futuros canales y dispositivos de almacenaje de información. El disolvente que utiliza el artista para borrar las impresiones vinílicas es el mismo que se usa en muchos países latinoamericanos para borrar anuncios de las grandes vallas publicitarias de ciudades y carreteras, lo que hace predecir necesariamente la llegada del siguiente cartel. En la serie Souvenirs, en cambio, las imágenes rescatadas de su disco duro son sólo modificadas por un algoritmo computacional. En estas impresiones, también de calidad píxel, no hay huella del autor y el pasado es una variable constante, a diferencia de los vinilos donde el artista pinta sobre su biografía, modificando su memoria aunque sea con la inten ción de borrarla aún más. Souvenirs son recuerdos sin apenas experimentación por deslocalización: son imágenes de paisajes, divisados a través de la ventana del ordenador y extraídos de Internet, un nuevo Romanticismo fruto de la revolución digital.

Enrique Radigales ( Zaragoza, España, 1970) se especializa en Pintura en la Escuela Massana y más tarde en Sistemas Interactivos en la UPC, ambas en Barcelona. Ha sido residente en la Casa de Velázquez ( Madrid), en el Museu da Imagem e do Som (São Paulo) y en Eyebeam (Nueva York). Sus grandes instalaciones se han podido ver en el Matadero de Madrid y en el Centro Cultural de España en Guatemala. Ha expuesto individualmente tanto en España como en el extranjero, siendo esta su primera exposición en la galería The Goma.