Los responsables de la Bienal Europea de Arte Contemporáneo, Manifesta, que en 2014 celebrará su décima edición y cumplirá veinte años desde que se organizara por vez primera, acaban de anunciar que su sede oficial será el Museo del Hermitage de San Petersburgo, en Rusia, que celebrará, además, el próximo año, su 250 aniversario. Una elección, que a pesar del comunicado oficial emitido por la organización, en el que se justifica ésta "por la relación crítica intelectual e histórica del Museo del Hermitage con Europa del Este y Oeste....", sorprende, por ser la primera vez, que la Manifesta se ubicará en una ciudad de un país no perteneciente a la Unión Europea, como ha ocurrido en las anteriores ediciones: Manifesta 1, Rotterdam, Holanda, 1996; Manifesta 2, Luxemburgo, Luxemburgo, 1998; Manifesta 3, Ljubljana, Eslovenia, 2000; Manifesta 4, Frankfurt, Alemania, 2002; Manifesta 5, San Sebastian, España, 2004; Manifesta 6, Nicosia, Chipre, 2006 (cancelada); Manifesta 7, Trentino-Alto Adige/Südtirol, Italia, 2008; Manifesta 8, Murcia y Cartagena, España, 2010; y Manifesta 9, Genk, Bélgica, 2012.

Quizás en este sorprendente viraje a Rusia hayan jugado un papel decisorio las profundas dificultades económicas que atraviesan desde hace tiempo la mayoría de los países comunitarios así como sus negativas perspectivas económicas, para éste y el próximo año, lo cual dificulta su apoyo a eventos de este tipo, mas si cabe, cuando sus presupuestos nacionales en cultura están sufriendo fuertes recortes. Por ello, los responsables de Manifesta, entre ellos, su presidente actual, el ruso Viktor Misiano, podrían haber tenido en cuenta que con la elección de San Petersburgo, en Rusia, un país cuyo PIB puede crecer este año 2013 entre el 3 y el 4%, superando el respectivo indicador de muchos países europeos -como Alemania, el principal país de la UE, con un crecimiento en torno al 1% este año-, se garantizan la estabilidad económica necesaria para la organización de su décima edición. Así pues, comprobamos cómo Rusia no sólo apuesta por organizar eventos deportivos como los próximos Juegos Olímpicos de Invierno de 2014, en la ciudad de Sochi, que serán los más caros de la historia, con más de 36.000 M. de Euros gastados, es decir, 10 veces más que el presupuesto de Albania y Moldavia juntos, sino que también lo hace por eventos culturales como la Manifesta 10 en San Petersburgo, cuyo comisario jefe será anunciado a lo largo de este mes de marzo, y con ello, su línea curatorial. Gustavo Pérez Diez. ARTEINFORMADO