El proyecto 'Estaría bien que en algún momento podamos beber agua' de Laia Ventayol García forma parte del itinerario deslocalizado "1+1+1...", que se desarrollará por el Barri Gòtic y el Born del 9 al 21 de noviembre.
Estaría bien que en algún momento podamos beber agua trata sobre un encuentro en la montaña para buscar agua subterránea, pero sin finalidad extractivista alguna. Nace del deseo de Ventayol de desarrollar esta habilidad corporal, ejercitando la propia sensibilidad con la que percibirá el rumor del agua que corre bajo el suelo y que permitirá encontrar el agua. La palabra zahorí proviene del árabe hispánico zuhari, que a la vez deriva de azzuharah. Zahar significa brillar. La capacidad de los zahorís se llama radioestesia (o también hidroscopia), y se define como la sensibilidad para percibir las radiaciones. Esta es una facultad ancestral y animal del hombre. Cuando todavía se es principiante, se utilizan instrumentos...muy sencillos que funcionan como amplificadores de las radiaciones. El zahorí veterano raramente necesita estos artefactos, y solo utiliza el cuerpo. Existen numerosos manuales que explican exhaustivamente cómo posicionar el cuerpo, sobre todo los pies, la espalda, las manos y los dedos. Ventayol colecciona estos manuales sobre todo por su interés en los dibujos que contienen, curiosamente, similares a antiguas hojas de instrucciones para el montaje de un aparato utilitario.
Participantes / actores: Laia Grau, Mireia Fornes, Maria Bonet, Toni Viejo, Lluís Nebot, Agustí Nebot, Joan Terrassa, Tomeu Torres, Xisca Fuster y Toni Bonet.
Cámara: Agustí Torres
Edición: Laia Ventayol García, Sofía Sasso
Música: Jansky
Entrada actualizada el el 29 oct de 2021
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