NoguerasBlanchard presenta la tercera exposición individual en la galería de Anne-Lise Coste (Marsella, 1973). Tras sus anteriores exposiciones FRANCE, donde la artista denunciaba la política social de su país, y Save Picasso, donde planteaba una crítica radical contra la comercialización de la cultura, 5 days 5 years plantea una revisión, por primera vez en su obra, a una etapa muy concreta de su vida revelándonos una de sus vivencias más traumáticas.

En esta exposición, Coste nos acerca a su mundo interior quizás a modo de ejercicio terapéutico. Mediante el uso del dibujo y de la escultura la artista proyecta imágenes de un período de su juventud. De manera reiterativa y obsesiva aparece representado un único escenario: una habitación. Con austeridad formal, líneas angulosas y con notable cariz geométrico, nos muestra el lugar opresivo y ... angustioso que guarda en su memoria. En algunos de los dibujos también podemos observar la presencia de la artista desdibujada con garabatos, elemento que acentúa más el dramatismo. En las esculturas, Coste reconstruye en miniatura una habitación: una silla, una cama y una cruz son los únicos objetos que la ocupan, realizados con hierro abandona los materiales Póvera que caracterizaban sus instalaciones anteriores. Como en la instalación de Joseph Beuys Espacio de dolor, el material se incorpora como un elemento expresivo más en la obra.

El dibujo tiene un peso fundamental en el trabajo de Anne-Lise Coste y a través de él retrata un universo basado en sus códigos idiosincrásicos; su imaginación y lo cotidiano siendo la materia prima que inspira sus obras. Rechazando deliberadamente la adopción de convenciones lingüísticas o artísticas, Coste utiliza el lenguaje (la más necesaria de las convenciones) alterándolo y reinventando sus reglas, de esta manera revela la insuficiencia del lenguaje como sistema de comunicación. Sin embargo, en 5 days 5 years paradójicamente el texto es inexistente, ni las frases fragmentadas ni las palabras acompañando figuras pictóricas le sirven para hablar de aquello más profundo, más personal como sí lo hacen cuando se coloca en relación al mundo. En esta exposición, Coste nos hace cómplices de su mundo interior, exponiéndose a si misma, sus miedos y ansiedades, con una sensibilidad tan desgarradora como poética.