La galería Leandro Navarro tiene el placer de inaugurar la temporada con la exposición Millares - Padorno. A la sombra del mar. La muestra podrá visitarse del 10 de septiembre al 30 de octubre de 2020. Arpilleras, lienzos y papeles dan cuerpo a un diálogo plástico entre dos maestros de la pintura abstracta y de las letras, Manolo Millares y Manuel Padorno.
La noción de nómada urbano atraviesa la obra de Padorno y cimienta el presente proyecto expositivo. La condición de nómada indica su interés por transitar y pensar un doble espacio, la línea temporal de la historia de la pintura por un lado y la vivencia de la arquitectura metropolitana por otro. Ambos territorios constituyeron pilares de su reflexión. Así pues sobre el conjunto de planimetrías constructivistas expuestas se observarán variadas respuestas a la influencia histórica de pintores como Monet - en Nomada urbano: Giverny -, Barnett Newman, Rothko, Giotto...y Manolo Millares. En su totalidad el grupo de pinturas agrupadas bajo el título Nómada urbano comparten un formato vertical propio de la arquitectura neoyorquina que tanto impactó a Padorno.
Unidos desde 1953 por la amistad, Millares y Padorno colaboraron en múltiples proyectos culturales tales como la revista artesanal Astil o el drama poético Oí crecer a las palomas. Temprano proyecto en común de corte experimental e históricamente relevante fue el happening titulado Manifiesto contra el clasicismo en el que ambos autores, junto al pintor José María Benítez y al escultor Tony Gallardo, declararon su rechazo a los preceptos de la academia destruyendo una sirena de estilo clásico en el estudio de Martín Chirino.
Estos vestigios quedan recogidos en la exposición en la tercera sala junto a los Machangos y monigotes, obra en papel temprana de Padorno en la que de manera gestual y expresiva elabora unas escenas neofigurativas que recuerdan a Alberto Greco.
La presencia de icónicas obras de Millares - teniendo especial interés las arpilleras Cuadro 18 (1), Cuadro 113 y Antropofauna-paloma — contribuyen a ilustrar ese vínculo entre los dos artistas canarios, un vínculo que trascendió lo afectivo y lo colaborativo. En este sentido resulta emocionante el homenaje que Padorno le dedica a su amigo en Nómada urbano 107: Manolo Millares, pintura de gran formato expuesta en la última sala junto al poema inédito El lienzo entrañable, 10 años después de su muerte.
Imágenes de la Exposición
Manuel Padorno, Nómada Urbano 110 — Cortesía de la galería Leandro Navarro
Entrada actualizada el el 11 sep de 2020
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