En esta ocasión tenemos la oportunidad de presentaros la colección A safe place de J.L. Jardí, artista creador de una pintura narrativa, fruto de un laborioso proceso.

Jardí tiene la gran capacidad de interiorizar los sentimientos, de pintar los estados anímicos, de pintar la soledad, la ausencia, la espera, el recuerdo, la esperanza y los deseos. Por eso, tanto los personajes que habitan sus cuadros como los colores que utiliza e incluso la atmósfera que envuelve cada ambiente, tienen un papel determinante en el escenario de sus telas.

Es una buena ocasión para disfrutar de una pintura emocional, llena de referencias y de gran carga simbólica.