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Sólo cuando, al contemplar un cuadro, nos decimos 'por aquí pasó la vida' podemos estar seguros de encontrarnos ante una verdadera obra de arte. Ese es el sello del talento, la marca de la creatividad: el artista que se alía con la vida, para ensalzarla, para increparla, para dejar constancia de nuestro paso efímero por ella. Las obras de Belén Pallarés nacen de ese don. A veces son los rostros y las figuras humanas, entrevistas o explícitamente protagonistas, que se agrupan, se multiplican, se desdoblan como facetas de un poliedro, como respondiendo a la geometría radical de la existencia. Otras, son los objetos que dan testimonio del paso del hombre, huellas de vida, como esos pies que, metafóricamente, atraviesan el lienzo marcando el camino.

No es casual esa imagen en marcha. La pintura de Belén Pallarés tiene una dimensión narrativa. Hay en ella una aproximación al objeto pintado, pero también al tema. Las técnicas mixtas que utiliza reflejan el peso de una tradición pictórica -sí, en estos inicios del siglo XXI las vanguardias históricas del XX, el cubismo, las técnicas de collage, son ya tradición- y la naturalidad con que se combinan en la obra nos dice que esa tradición ha sido plenamente asumida, y que forma parte del pulso de la mano de la artista. No hay nada impostado en sus composiciones. El mundo abraza a los objetos con la movilidad de su luz, casi se siente respirar al viento en la ventana cercana, casi se oye el paso de las horas entorno de esa cesta de huevos que permanece inmóvil mientras el universo gira. Y la pintora gira también en torno de sus temas. Se acerca a ellos desde todas partes, nos va contando esa aproximación, va dejando sus propias huellas en los lienzos, el roce amoroso de la mano sobre la superficie pulida de la botella, la mirada que acompaña la calma de la siesta.

La vida ha pasado por estas obras y la sensibilidad de la artista nos acerca a ella con una sabiduría no exenta de ironía. El mundo está ahí, ante nosotros, pero son nuestros ojos mentirosos quienes lo cuentan. Materia hecha color y vagas sombras. El volumen de las cosas y su dibujo,. El ser y el ser visto. Cuánto talento.