Este artista trabaja desde 1998 en una serie que denomina genéricamente Camino, un conjunto de obras poéticas a partir del paisaje que transita y que plasma en intervenciones y diversas prácticas procesuales in situ. Una obra autobiográfica de inspiración romántica, reflexiva e incluso en ocasiones melancólica, fruto de un continuo deambular meditativo a partir de la naturaleza.
En 2010 se trasladó a vivir a la ciudad de Cáceres, desapareciendo los caminos idílicos, los pastos, los árboles y los horizontes del campo. La ciudad le ha llevado a incorporar en sus trabajos artísticos nuevas influencias y aportaciones conceptuales. Las obras de estos últimos años tienen un matiz literario, proverbial y humanitario, aunque siguen evocando esa sensación de fuga y evasión de los descampados que anteriormente. Realiza intervenciones y ocupaciones efímeras y discretas en espacios naturales y urbanos que titula o nombra. Pasea de madrugada, en soledad, tanto por caminos y calles que...duermen, donde no hay personas, un espacio de postcivilización.
A. Talavero, alumno, amigo y admirador de la obra de Juan José Narbón, se ha sentido siempre cercano e influido por su pensamiento y emprendió en diciembre de 2017 la acción Narbón ha vuelto, una serie de actividades creativas que se han desarrollado hasta diciembre de 2018, convocando a los asistentes a las puertas del Museo del artista en Malpartida para reivindicar que se proteja su obra y su memoria. Principio, 2018
Entrada actualizada el el 11 may de 2019
¿Te gustaría añadir o modificar algo de este perfil?
