La chocolatera es el objeto sobre el que se ha trabajado este año y a partir de hoy se expone en el espacio gastrocultural del Museo San Telmo una selección de los trabajos presentados a concurso, entre ellos el ganador, NAHUA, de June Lizaso Odriozola y Marta Loidi Urquizu.
Tras un año de interrupción debido a la pandemia se ha celebrado por cuarto año el Concurso de diseño de objetos tradicionales vascos HAU organizado por Bitamine Faktoria, con la colaboración de San Telmo Museoa, la Sociedad de Ciencias Aranzadi, Mondragon Unibertsitatea, la empresa Ibili menaje y el chocolatero y confitero Rafa Gorrotxategi. El objetivo del Concurso de diseño de objetos tradicionales vascos HAU es actualizar el diseño de un objeto tradicional presente en la cultura vasca. De esta manera, se contribuye, por un lado, a la investigación y a la eventual recuperación de usos y costumbres tradicionales y,...por otro, a una adaptación, renovación y reinterpretación de objetos tradicionales desde el punto de vista del diseño contemporáneo, estableciendo nuevas relaciones con nuestra historia y ampliando las líneas de investigación y los campos de acción del diseño.
Se trata, en definitiva, de recuperar las huellas de nuestra experiencia etnográfica a través de las prácticas del diseño con el objetivo de fortalecer los vínculos entre la tradición y la contemporaneidad, aunando el respeto y reconocimiento del diseño artesanal con la experimentación y potencialidad del diseño industrial contemporáneo.
La pieza objeto de revisión en esta convocatoria es la chocolatera, un utensilio de cocina utilizado en Euskal Herria para batir y preparar el chocolate.
En la exposición se puede ver el trabajo ganador del concurso, NAHUA, de JUNE LIZASO ODRIOZOLA y MARTA LOIDI URQUIZU, junto con una selección de los trabajos más destacables que se han presentado:
• Nora Gondat Unzalu, Eider Sanchez Imaz (MOKAMA)
• Aitor Marauri Jauregui, Oier Arevalillo Labayen (LATXOKO)
• Maitane Urkiola Martinez, Ane Barandiaran Lopez de Audicana (EDONORA)
• Malen Deniz Ayerbe, Mireia Elexpe Román (GOXOKO)
• Miren Loiti Jaca, Ibone Aboitiz Anakabe (GOXOPOT)
• Paula Iglesias Izcue, Eider Gabirondo Lopez (IKATZ)
• Arrate Serrano Otadui, Uxue Cabañes Iturbe (K'AKAW')
Jurado
El jurado ha estado compuesto por personas vinculadas al campo del diseño y la etnografía vasca. En esta edición, conforman el jurado las siguientes personas:
• Fermín Leizaola Calvo (director del Departamento de Etnografía de la Sociedad de Ciencias Aranzadi)
• Elisabeth Urrutia Bea (profesora e investigadora de diseño industrial en Mondragon Unibertsitatea)
• Agurtzane Garai Ibarluzea (responsable de mediación de San Telmo Museoa)
• Iosu Rodriguez Bilbao y Jon Lamborena García (director general y diseñador de productos de Ibili Menaje, respectivamente)
• Rafa Gorrotxategi (chocolatero y confitero)
• Carlos Sánchez Crespo (en representación de Bitamine Faktoria).
Fallo del jurado
El jurado ha premiado el proyecto NAHUA de June Lizaso Odriozola y Marta Loidi Urquizu.
“NAHUA combina con destreza y sensibilidad los aspectos técnicos, funcionales y formales del objeto, propone un diseño que destaca por su riqueza en el lenguaje empleado, mantiene la fidelidad con el objeto original y actualiza, además, alguna de sus características principales a los usos y costumbres actuales. Todas esas cualidades validan el proyecto y hacen viable su introducción en el mercado, según los parámetros industriales actuales”
El jurado coincide en valorar el gran nivel de los proyectos presentados, así como la meritoria y destacable labor que han desarrollado todas las personas participantes en investigar y actualizar el diseño del objeto propuesto, destacando varios proyectos
Mención especial: MOKAMA, de Nora Gondat Unzalu y Eider Sanchez Imaz
“El jurado destaca por un lado, sus aportaciones innovadoras que conectan con el lenguaje estético contemporáneo y, por otro, la sensibilidad mostrada en la investigación y desarrollo del diseño, que quedan recogidos de manera magnífica en la memoria del proyecto.”
Proyecto finalista: LA TXOKO, de Aitor Marauri Jauregui y Oier Arevalillo Labayen.
“El jurado destaca su notable contribución a la reinterpretación de la chocolatera guardando la fidelidad con la pieza original.”
Premio
El jurado otorgará un único premio consistente en 1.000 euros netos al mejor proyecto presentado. Las personas responsables del proyecto ganador podrán realizar una visita profesional a la sede de Ibili (Bergara, Gipuzkoa), empresa colaboradora en el concurso, siempre que la situación sanitaria lo permita.
Por su parte, el jurado ha seleccionado los diseños más relevantes que se expondrán en el espacio gastrocultural de San Telmo Museoa del 29 de junio al 30 de septiembre.
Bitamine Faktoria
Bitamine Faktoria es una fábrica de creación y producción cultural transfronteriza destinada a la promoción e internacionalización de la cultura, el diseño y el arte contemporáneo a través del desarrollo de proyectos interdisciplinares de carácter innovador, creativo y experimental. Tiene su sede en Irun.
Objeto seleccionado HAU 2021
El Concurso de Diseño de Objetos Tradicionales Vascos HAU ha propuesto como pieza objeto de revisión en la convocatoria de este año la chocolatera, una vasija que servía para batir y preparar el chocolate.
La chocolatera consiste en una vasija tubular, abombada o ventruda en su mitad inferior, lisa en la parte de la boca, y provista de un mango, que sirve para sostener y servir el chocolate. En la parte superior, dispone de una tapa con un orificio en la parte central donde se introduce el batidor o molinillo de madera, consistente en una barra larga que sobresale por la abertura de la tapa para que gire a ambos lados, impulsada por las dos palmas de las manos. Esta barra, en su parte inferior, es rematada por un cilindro estriado, que al girar a ambos lados, bate las onzas de chocolate sumergidas en agua o leche hasta deshacerlas y espesar el conjunto, que si es ligero era denominado a la francesa y si es espeso a la española. Este es el origen del conocido dicho: “Las cosas claras y el chocolate espeso”. Por otra parte, el pareado “el chocolate poco hervido y muy batido” sirve de consejo popular para su correcta preparación. Algunas de las chocolateras se asentaban sobre una peana o sobre unas pequeñas patas.
El uso de este objeto de cocina se documenta desde el siglo XVII hasta las primeras décadas del siglo XX. En cuanto a su material, podía estar manufacturado en cobre, latón, cristal, porcelana, loza o hierro colado (con el interior esmaltado). Ya en una época posterior, también se fabricaron modelos eléctricos provistos de una resistencia que calentaba el chocolate. Las que no eran de cerámica se podían disponer sobre el fuego para preparar la mezcla en su interior (cacao puro y leche, o simplemente cacao y agua). En cuanto a sus medidas aproximadas, las piezas eran de entre 20-30 cm de altura, con una base de unos 10 cm de diámetro, que se achicaba en la parte superior.
En el habla dialectal en el País Vasco la chocolatera se ha recogido de muy diversas formas, por ejemplo: txokolate-ontzi txokolatontzi, xokolet-ontzi o xokolet-untzi, kokolontzi, kokoil-eltze, xokolen-ontzi, xakolet-untzi y txokolatera.
San Telmo Museoa muestra tres piezas de la colección en su exposición. La primera de ellas data del siglo XVIII y se puede ver en el apartado dedicado a la Ilustración, dentro de la sección Huellas en la memoria. Los otros dos ejemplares se exponen en el apartado La tradición pervive, en su contexto original, la recreación de la cocina de un antiguo caserío.
Entrada actualizada el el 29 jun de 2021
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