Transfusiones es una serie de exposiciones y actividades de arte contemporáneo que se han diseñado dentro de la programación 2017 del Centro Cultural España en Lima, con la intención de crear un diálogo intercultural entre jóvenes artistas españoles y peruanos. Estos, a través de sus exposiciones bipersonales, nos plantearán una serie de temáticas relevantes por su nivel de incidencia en el contexto cultural global. Aportándonos sus miradas mediante las creaciones y las relaciones que se establezcan entre sus obras.
Por ello, iniciamos el año con la apertura de este programa de arte contemporáneo con la exposición bipersonal Deus ex machina que reúne diversas piezas del trabajo de los artistas Alán Carrasco (España) y Raura Oblitas (Perú). Deus ex machina hace referencia a la locución latina que responde a la idea helénica del "Dios desde la máquina", es un concepto literario que tiene lugar cuando una trama complicada con un nudo complejo...se resuelve de improviso por una suerte de intervención divina, o un ente externo que lo remedia. El deus en cuestión no tiene por qué ser necesariamente un personaje, sino que puede ser un elemento o un factor no previsto que actúa como un agente de poder -incluso "liberador"- ante una situación de conflicto que se presenta sin salida o irresoluble. Su intervención sigue una lógica propia (generalmente sin relación con la lógica interna del problema) y provee una solución que sólo él mismo puede dar, conduciendo así la narrativa a un desenlace cronológicamente gratificante, pero que, en un estrato más profundo, responde a una realización estereotípica del deseo del lector o espectador.
Aristóteles ya condenaba en su Poética el truco narrativo del deus ex machina, porque no presentaba ninguna necesidad verdaderamente estructural, aparte de resolver temporalmente la sucesión de hechos se que se daban lugar los unos a los otros, de un modo circular. En realidad, este recurso autoritario de resolver un conflicto a través de injerencias irracionales se ha seguido utilizando a lo largo de la historia como un modo de rellenar vacíos y carencias en ámbitos que han desbordado lo literario, dado que el deus es, en esencia, un mecanismo de poder. Su lógica particular se alimenta de un silencio, de un vacío argumentativo en la fundamentación del poder: un vacío que, además, el deus se empeña en esconder. Este vacío desnaturaliza los aparatos de poder y los revela en su esencia de inautenticidad, es decir, pura y simple violencia.
En el contexto moderno, el deus ex machina trasciende la idea misma de soberanía: son los mecanismos de formación, establecimiento, ordenamiento, disciplina y control del poder en todas sus formas, pero sobre todo en aquellas que beben de un ordenamiento normativo. Las obras de Alán Carrasco (1986) y Raura Oblitas (1979) versan sobre estos mecanismos, y sobre el modo en que han sido introducidos en el devenir de la historia o en la existencia de un pueblo -ya sea a través del poder mismo, en forma de elementos foráneos o bajo la apariencia de aparatos institucionales, cuyos ejemplos paradigmáticos son el lenguaje, la idea jurídica de una Constitución, la educación, la religión o los símbolos nacionales-. Estos aparatos cumplen la función de sistematizar, dirigir, habitar y legitimar estructuras que han sido establecidas violentamente como las bases de la democracia liberal. El Estado, en sí el deus ex machina por excelencia, se ha dedicado más a defender estas estructuras que a esforzarse en otorgarles la legitimidad histórica y social que vienen pidiendo.
Por lo que esta primera muestra de Transfusiones, nos desgranará los mecanismos de Deus ex machina. Con el ánimo de revelar las dinámicas de estos aparatos y sus circunstancias. Además de dar voz a sus silencios, evidenciando así el proceso violento que se esconde tras la narración histórica.
Entrada actualizada el el 20 abr de 2017
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