La importancia del trabajo gráfico de Liliana Porter se debe tanto a su larga producción en este campo, como al carácter seminal que tuvieron los procesos gráficos para la formación de su imaginario y práctica artística. Partiendo de una crítica de la tradición artesanal gráfica, Liliana comienza a utilizar sus posibilidades conceptuales y ahí encuentra una línea que le permite enriquecer su trabajo, apropiándose y convirtiendo los procesos gráficos en procesos de pensamiento, intervención e invención. Hemos reunido un conjunto de obras que abarcan desde 2005 hasta 2020 que configuran una muestra significativa de su trabajo, donde se pueden apreciar tanto los aspectos de su poética de la imagen, del objeto encontrado, de lo pequeño significativo, como la importancia de los blancos del papel como espacio donde suceden situaciones. Y detrás siempre hay una hermosa o triste o increíble historia.