“Douleurs, Migraines et Sonates es la búsqueda de un espacio en el que, el plano sensitivo y el sensible, tienen el mismo poder.”
Nuria Riaza
“Vi una gran estrella, espléndida y bellísima y con ella una gran multitud de estrellas fugaces. Y de pronto todas fueron destruidas y se convirtieron en carbones negros”.
Hildegard de Bingen
Nuria Riaza dibuja, pinta y cose. Sus obras son fruto de las reflexiones personales que le provocan el dolor físico y emocional de una mala genética. Una luz blanca, seguida de un zumbido, da comienzo al ceremonial. El hormigueo de los pies a la lengua y la incapacidad de articular palabras la llevan a la nada. Un destello de colores lateral surge con fuerza como si se tratara de una alucinación provocada por el LSD. Un pitido y dolores punzantes se repiten en un punto concreto. El desamparo al saber que estas sensaciones se van a reiterar y...siempre estarán fuera de control, le lleva a la necesidad de aislamiento total ante el desgarro más profundo de un interior que solo piensa en aullar y vaciarse por fin. Nuria dibuja, pinta y cose su vivencia con la migraña con aura.
La migraña es un dolor de cabeza recurrente que aparece de manera paralela a los trastornos sensoriales conocidos como aura. Un padecimiento conocido desde hace miles de años y que ha afectado, de manera curiosa a lo largo de la historia, a numerosos artistas que trasladaron a sus obras las imágenes experimentadas durante los brotes. Ha sido fuente de inspiración para movimientos artísticos como el Surrealismo, el Dadaísmo y la pintura de la Scuola Metafísica, que buscaba ir más allá de la realidad, precisamente física. Artistas como Giorgio de Chirico, su máximo exponente, exploraban en sus pinturas la vida interior mezclada con objetos cotidianos, aislados, en atmósferas oníricas y arquitecturas taciturnas, que siempre miran al pasado. Del mismo modo, Nuria profundiza en lo real y se adentra en las zonas oscuras para mostrar lo fantástico que puede resultar el dolor en su cotidianeidad. Con un conocimiento conciso de la situación que la afecta y un exquisito rigor técnico, nos traslada entre delirios de fantasía y realidad a su mundo particular, tal y como lo hizo Carroll en sus libros.
Douleurs, Migraines et Sonates está formado por un imaginario propio que nace de la familia, de sus recuerdos y herencias genéticas en forma de objetos materiales que la acompañan, pero que también se inspira en los dibujos de los libros de medicina antiguos, donde encuentra los modelos a los que trasladar su experiencia. Figuras circulares y distorsionadas, como las ondas químicas que se mueven a través de la corteza del cerebro; auras pintadas que expanden el acrílico y convierten los objetos en líneas en zigzag; la tinta del bolígrafo BIC que funde el azul y el negro en las zonas de sombra y las vuelve escotomas; y los hilos de algodón de tonos primarios intensos, que se hacen fuertes frente al papel como una alucinación, son los elementos que retratan la realidad impresa en la obra de Nuria Riaza.
Cristina Chumillas
Comisaria
Imágenes de la Exposición
Nuria Riaza - Cuidado, frágil — Cortesía de Plastic Murs
Entrada actualizada el el 19 may de 2020
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