José M. Jiménez
Cinéfilo por vocación. Tras el confinamiento decide aprender, en una muestra más de resiliencia, a usar su recién adquirida Nikon D3500 gracias a un "extraño" exceso de tiempo libre. "El paraíso perdido" es una primera muestra de un entorno mágico, al que tengo la suerte de pertenecer, utilizado como marco de aprendizaje en el bello arte de retratar imágenes.
El paraíso perdido
La principal referencia al título elegido para mi primera exposición hace honor al poema narrativo del autor inglés John Milton. En esta obra del siglo XVII, clave en la literatura universal, el autor reflexiona sobre la caída de Adán y Eva del paraíso y se pregunta cómo un Dios tan poderoso y bondadoso podía permitir tanto mal en el mundo.
Mis fotografías tienen un toque menos bíblico, quizás gracias a mi atrevido ateísmo, pero sí es fruto de unos años de mucho dolor, sufrimiento, posterior pandemia y, al final,...triunfo de la resiliencia. En esta obra quiero evocar un mundo de ensueño, lleno de positividad y belleza, haciendo un homenaje al lugar que me ha visto nacer y crecer como persona. Evocar al paraíso como algo nuestro, pero a la vez borroso, a consecuencia de una miopía causada por un estilo de vida en lo que lo único que importa es la productividad para favorecer a un sistema que ni te cuida, ni le importas, ni te protege.
Es nuestro paraíso, el de las personas normales, y que no esté perdido depende de que abramos nuestros ojos, cuidemos nuestro planeta, nuestro entorno, y nos ayudemos los unos a los otros. Porque este paraíso nos pertenece, y no hay Dios, por "bondadoso" que sea, que nos lo pueda quitar. Este sería mi paraíso, y sinceramente espero que lo encontremos para que nunca jamás vuelva a estar perdido.
Entrada actualizada el el 20 ene de 2022
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