En el proyecto "El sueño del Ornitólogo (del Phylloscopus sibilatrix a la Oxyura jamaicensis)", Juan del Junco recrea, mediante los recursos que le proporciona la cámara fotográfica, la mímesis de un hipotético "estilo científico". Durante meses de paciente registro y siguiendo un estricto programa metodológico, del Junco ha elaborado un personal -al tiempo que técnicamente impecable- inventario fotográfico de la colección de pieles de aves custodiadas en la sala especializada de la Estación Biológica de Doñana.

Las pieles de aves son aves disecadas, pero sin naturalizar, esto es, sin adoptar poses que simulen la vida animada. Para constituir su propio archivo, el fotógrafo ha escogido trescientas de las cerca de mil especies que con fines científicos se han ido coleccionando en aquel centro de investigación, tanto de fauna ibérica como sudamericana, representadas por varios ejemplares que ilustran las distintas fases del desarrollo, así como las diferencias sexuales o ... estacionales entre estos animales.

La selección de fotografías que ha empleado para el proyecto específico instalado en la capilla de San Bruno muestra cada ejemplar a su tamaño real, rigurosamente encuadrado en el centro de la imagen, sobre un fondo claro, sin manipulaciones ni alteraciones. Prendida de la pata de cada ave se puede ver, y en ocasiones leer, la correspondiente etiqueta identificativa. La ambientación recuerda la asepsia fría del laboratorio.

Vinculado al campo de la ornitología por razones familiares, este interés personal de Juan del Junco ha pasado de ser una mera anécdota, a convertirse en la clave biográfica que sustenta un interés artístico creciente por explorar la relación entre arte y ciencia y sus respectivos métodos y sistemas de representación. Si bien el carácter científico del trabajo de Juan del Junco estaba matizado por una actitud a un tiempo lúdica y poética, en este proyecto subraya la importancia del rigor del método, no para la obtención de certezas, sino para apuntar a una narración abierta, teatral que busca trastocar las leyes del documentalismo fotográfico porque no quiere renunciar a dar constancia de la experiencia íntima.