El Museo de Arte Contemporáneo de Buenos Aires | Fundación Aldo Rubino y la Asociación Amigos del MACBA presentan 'RICARDO LAHAM. FORMA Y ESPACIO', una retrospectiva curada por Rocío Videla Dorna que reúne la obra del artista argentino Ricardo Laham. Con esta muestra se presentan, por primera vez en un mismo espacio de exhibición, las distintas instancias que caracterizaron el proceso de un artista fundamental para el desarrollo de la abstracción geométrica en nuestro país.
Nacido en 1940 en Buenos Aires, Laham se formó en el taller de Emilio Pettoruti a cargo de Alejandro Vainstein y Mónica Solers Vicens. Durante su estancia en Europa en el año 1963 Ricardo se escribe frecuentemente con Pettoruti, quien se convirtió en su mentor. En esta correspondencia se evidencian recomendaciones precisas sobre aquellos museos y galerías que Laham debía visitar: “ni bien llegas a Milán en la que te encontrarás con el mundo moderno, lo...primero es ir a la Galería Brera que guarda grandes obras de arte. Además de encontrar las obras de los alumnos de Leonardo, hay dos obras maestras, uno de Piero della Francesca, la otra de Rafael.” (1)
En sus inicios el joven artista se vio fuertemente influenciado por los viajes que realizó a Europa. Sin embargo decide regresar a la Argentina y gestar un arte profundamente americano, alejado de las corrientes extranjeras. Esta decisión lo llevó por un recorrido hacía Perú y Bolivia donde estuvo en contacto con la arquitectura prehispánica y fueron esos diseños los que inspiraron la serie de obras que forman parte de su primera etapa, entre 1968 y 1977. Este trabajo lo acerca a la larga tradición constructivista impulsada por Joaquin Torres García, idea que circuló fuertemente durante la década del 40 en nuestro país y que fue recuperada en clave indigenista por artistas como Alejandro Puente y César Paternosto.
Posteriormente la búsqueda por un lenguaje propio lo llevó a reducir su paleta al blanco y negro, permitiéndole profundizar en las relaciones entre forma y espacio, aspecto clave en el desarrollo de su trabajo. A raíz de estas exploraciones el artista construye piezas que se caracterizan por generar un efecto óptico de movimiento. En 1979 el crítico César Magrini se refirió a esta serie como “sinfonías en blanco y negro”, haciendo alusión a la musicalidad de las piezas. En 1984 el artista sintió que se encontraba en un camino cerrado y decidió abandonar la abstracción geométrica. Retomará esta corriente treinta años más tarde, en un contexto completamente distinto al de principios de los ochenta. La irrupción de las nuevas tecnologías, la preponderancia de lo audiovisual, la saturación de las imágenes caracterizan el mundo en donde Laham produce su trabajo geométrico reciente. En este conjunto de obras el artista explora el color mediante combinaciones complejas y saturadas e introduce la tridimensionalidad dando lugar a un repertorio visual novedoso.
Laham pertenece a una generación de artistas del 70 que reivindicaron la pintura en un momento particularmente difícil, no solo por la preeminencia de corrientes estéticas que sostenían la muerte de los medios tradicionales, sino también por la creciente represión y censura que caracterizó al periodo y afectó profundamente los circuitos artísticos. A pesar del contexto adverso, sus obras fueron apasionadamente analizadas por prestigiosos críticos de la época, como Rafael Squirru, quien le dedicó una monografía en su volumen Pintura y Pintura. En 1977, en la revista Pájaro de Fuego, el entonces joven crítico Cesar Bandin Ron, decía: “No son pocos los que creen -y se me puede contar entre ellos- que el trabajo de Ricardo Laham conforma una de las más importantes obras geométricas desarrolladas en nuestro país”. Sus geometrías le valieron múltiples distinciones, entre ellas el premio Georges Braque (1969), Marcelo de Ridder (1973) y, recientemente, el Gran Premio de Honor del Salón Nacional (2008).
El camino desarrollado por Laham se ha caracterizado por la constante puesta en obra de un gran rigor en la concepción y elaboración de sus cuadros. Sus búsquedas fueron mutando a lo largo del tiempo, atravesadas por sus inquietudes personales y deseos de superación, pero también por los nuevos contextos que inevitablemente modifican el repertorio visual de un artista. Esta retrospectiva, además de ser un merecido homenaje a la trayectoria de Ricardo Laham, permite conocer y destacar la actualidad de su producción más reciente.
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(1) Breve fragmento de la carta escrita por Emilio Pettoruti a Ricardo Laham el 18 de junio en París en 1963.
Entrada actualizada el el 02 sep de 2021
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