La pintura es un arte lento. Como el tiempo. Tempus fugit... mentira. Somos nosotros los que huimos; no el tiempo: Éste permanece. Y la pintura también. O por lo menos, más que nosotros. Rafael G. Zapatero, uno de nuestros raros por excelencia y permanencia, vuelve a exponer en Madrid. RZ, aunque por generación, debería estar en el bando de nuestros “autistas modernos”,no lo está. La brecha que lo separa de su generación, no es solo la digital. Aunque su pintura, en última instancia se nos presenta comme il faut,; su generación, gestación y concepción, es profundamente moderna. Partiendo de base fotográfica, inevitable para el ojo moderno, y con todo tipo de apoyatura y asistencia digital, RZ nos ofrece unos resultados, tremendamente clásicos, referencialmente asistidos desde la propia historia de la pintura; y nos sigue remitiendo al concepto cuadro y la imagen pintada. Estable y única. Si por algo la pintura...no morirá nunca, es por este carácter de unicidad que posee. Su valor representativo, ha sido expoliado. Es el tributo que pago a la modernidad; en el fondo, una fruslería. Pero sigue siendo, de nuestros juguetes, el único, que no es reproducible; que no es poco. La mano que pinta la vida. RZ no renuncia a la base artesanal y soberana, de dedicar su tiempo a lo que le da la gana: a empecinadamente, seguir pintando. Dado nuestro pertinaz bloqueo y servidumbre intelectuales, nos quedara como siempre y último referente, lo extranjero y el París de la Francia. El concepto homeless, muy inglés, por supuesto, lo tenemos asimilado en España , desde nuestro sagrado Velázquez, o antes. Pero es este maravilloso palabro, el que lo ha entronizado como concepto, en uno de los iconos recurrentes del arte moderno internacional. Se ha jugado con el y se ha representado de las mas diversas maneras. Irónicamente y a lo tardo dada, como por ejemplo M. Kippenberger, o documental y exactamente como P. Gonnord. Pero quien lo ha verdaderamente conceptualizado y puesto en su sitio, a sido la eterna Francia, que con su reconocimiento a los derechos de los hijos de D. Quixote, le ha sacado la lengua a Nueva York, y a nosotros nos ha hecho un guiño. RZ, en su próxima exposición nos los representa, los pinta, levanta como acta notarial, para en el fondo, remitirnos a los vacíos de la Historia y los llenos de la Pintura. Lo moderno es hablar inglés, hacer en alemán, pensar en francés, esperar en chino y vivir y pintar en español. Ser moderno es estar a este lado de la brecha digital y de la consideración humanas, y ser moderno es en definitiva, y siempre lo será…el no ser estúpido.
Imágenes de la Exposición
Entrada actualizada el el 26 may de 2016
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