Homeland forma parte del trabajo que el Museu Nacional lleva a cabo para facilitar los diálogos entre los artistas contemporáneos y la colección, generando así nuevas lecturas y narrativas. Con este proyecto Mabel Palacín examina los diferentes aspectos de una fotografía al mismo tiempo que combina proceso, mecanismo y narrativa. La artista pone en marcha un proceso por el que una imagen es dividida en fragmentos que después vuelve a reunir en forma de un film que busca recomponer la relación perdida entre todas las partes. El original desaparece así en mil fragmentos que ponen a prueba los límites de la imagen. El Museu Nacional incorpora con este proyecto nuevas maneras de ver aquello que ya creíamos haber visto gracias al uso de las tecnologías de la imagen.