Una excelente exposición realizada en torno al paisaje con una gran diversidad tanto de artistas como de técnicas;
en esta exposición el público podrá deleitarse con piezas realizadas en pintura, dibujo - con sus diversas variantes técnicas-, grabado y fotografía. Además, la galería "Andrómeda 3.20" (sin fines de lucro) cuenta con tres salas digitales en donde podrán encontrar la obra de diversos artistas en exposiciones tanto individuales como colectivas.
La palabra “horizonte” significa literalmente límite visual y por definición esférico o circular, ya sea en referencia a la línea imaginaria que separa el cielo y la tierra como al territorio comprendido en ese círculo. Su acepción de margen temporal donde se desarrolla una actividad y sus posibilidades de éxito ha hecho que se use para describir acciones o aptitudes propias de una mirada escudriñadora y osada al mundo y al intelecto. Asimismo, la utilizamos para expresar las expectativas y esperanza...de futuro.
En el arte occidental ha simbolizado el límite, no sólo del mundo fenoménico y visual, sino del mundo substancial e intelectual, y del mundo terrenal y el espiritual, teniendo la cualidad de frontera trascendente (cuando se utiliza con esa voluntad expresiva) ante lo desconocido. Su ambivalencia le hace único e inquietante, pues sugiere cualidades contrarias: finitud e infinitud, principio y final, delante y detrás... Participa de la misma esencia paradójica del arte: la dualidad razón e imaginación. El horizonte se opone al caos, tanto en un sentido cosmogónico y cósmico como en el espacio representado. Su solo dibujo evoca una experiencia visual y ordena el espacio confiriéndole mensurabilidad y concreción. La capacidad de evocación y de significado le ha convertido en el signo gráfico por excelencia que concentra todas las cualidades del dibujo, convirtiéndose en su paradigma.
A lo largo de la historia su representación se ha ligado a la idea que el hombre ha tenido de sí mismo como parte del Universo, siendo expresión del límite de su conocimiento, su ignorancia o su fantasía. Todo el abanico de significados y formas que ha tenido el horizonte, de los cuales esta exposición ha recogido algunos, constituye parte de los temas recurrentes del arte, de los que bebe el pensamiento creativo. No solamente los artistas que los utilizan en sus obras, sino también las personas que las contemplan, pues es la tradición plástica la que cristaliza y hace comprensible el mensaje, lenguaje o emoción que puedan trasmitir. Su singularidad lo convierte en el elemento simbólico y estético donde más claramente se percibe el flujo de reflexión del pensamiento artístico, el hilo de la memoria visual donde resuenan ecos de emociones pasadas que el arte convierte mágicamente en presente.
Entrada actualizada el el 25 mar de 2021
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