La galería La Nave presenta la primera exposición individual de James Rielly en Valencia formada por una veintena de obras.

La pintura de los últimos años de James Rielly tiene su inspiración en el afán del artista por recopilar imágenes que selecciona en diversos periódicos y revistas pero también son el fruto de su predilección por el mundo infantil, predominando en ellas las figuras de niños que revelan la vida a tan corta edad, los sentimientos, la gestualidad y hasta en cierto modo el comportamiento.

Estas obras aparentemente frágiles e inocentes tienen un componente inquietante que fascinan nuestra vista y nos hace indagar tras la mirada de sus protagonistas buscando quizá un pretexto para estar ahí, un motivo que justifique la repetición de los motivos infantiles. Hay quien puede que interprete algunas de las obras como una ... denuncia a la explotación infantil, al maltrato o la pederastia.

La mayoría de las obras presentes en la exposición, óleos sobre lienzo, son retratos planos en los cuales no abundan elementos anecdóticos sino que la toda la atención nuestra va dirigida a la figura quizá porque Rielly quiere destacar la importancia de esta primera etapa de nuestra vida en la cual comienzan florecer los impulsos y deseos y se va conformando gran parte de nuestra personalidad.