La exposición fotográfica “La Copa Rosa” y el documental del mismo nombre de Antonio López Díaz podrá verse en Efti hasta el 6 de noviembre.
Este reportaje fotográfico y el documental nos conciencian sobre la situación de las mujeres en el Chad documentando el Proyecto de la Fundación Ramón Grosso.
Trailer: https://vimeo.com/401424099
Antonio López viajó a Chad junto a la ginecóloga Laura de Mingo para documentar un proyecto de la Fundación Ramón Grosso que consiste en charlas informativas sobre la menstruación en colegios y asociaciones de mujeres para ayudar a las mujeres de dicho país y concienciarnos de la situación que viven allí.
La menstruación sigue siendo un estigma cultural en África. En países como el Chad, durante el período, a las mujeres les está prohibido cocinar y en zonas rurales, las niñas no pueden ir a la escuela durante esos días. Son muchas las que abandonan las clases durante su menstruación...y las que llegan a dejar completamente sus estudios condicionando sus posibilidades de desarrollo personal. Su futuro suele pasar entonces por el matrimonio infantil forzado o a vivir en condiciones de marginalidad. Muchas niñas ocultan la menstruación, sin mencionarlo a sus madres o hermanas. Se trata de un tema tabú en las familias. La sexualidad en general es un tema incómodo que genera que las mujeres tengan un desconocimiento total de su propia anatomía.
Por otro lado, la mayoría de las mujeres no tienen acceso a productos sanitarios. Las compresas son un objeto de lujo que no se pueden permitir comprar. Sustituyen las compresas por trapos o incluso hojas de árboles o hierbas secas en las zonas rurales más pobres, para lidiar con su período. Las condiciones higiénicas son escasas y la falta de lugares apropiados o la falta de agua en las letrinas convierte la menstruación, algo tan natural en los países desarrollados, en un calvario.
La fundación Ramón Grosso ha llevado a cabo un programa de información sobre la menstruación en Chad, el proyecto se ha centrado en las ventajas de la copa menstrual para paliar esta situación, así como explicar a las niñas los cambios que conlleva en su cuerpo la pubertad así como negar los tabúes sobre la virginidad con el uso de estos dispositivos y han aclarado las dudas sobre la menstruación y la anatomía femenina en mujeres que nunca antes habían visto un tampón o una copa menstrual. La copa menstrual dura diez años y es una solución para las condiciones higiénicas del país. Se han realizado reuniones informativas con estudiantes, en asociaciones de mujeres con jefes de clínicas y hospitales y en reuniones privadas con ciudadanos influyentes.
Durante el proyecto se han distribuido 300 copas menstruales con el objetivo de implantar su uso entre los más desfavorecidos con futuras campañas de entrega de copas menstruales.
Entre las exposiciones del fotoperiodista y realizador de documentales Antonio López Díaz destacan “Una alfombra para Telmo” realizada en el Centro Hispano-Marroquí de la Comunidad de Madrid (2008) y “Nicosia la ciudad herida” patrocinada por el Instituto Cervantes y la embajada española en Chipre en la Universidad de Nicosia (Chipre 2012). Ha colaborado con distintas ongs publicando sus trabajos en infinidad de medios, el diario El País dedicó una exposición de una foto diaria sobre su trabajo “Higway 61”, sus documentales han sido exhibidos en distintos festivales de cine como Festifal, Cortada, festival Internacional de cine de Daroca, We art Water, Nómadas Perú, Sembrando cine o Concepción Independient Film adwards, destacando por su originalidad la proyección en el camposanto del festival de fotoperiodismo Visa Pour l´image en 2015 sobre el trabajo “Las Hijas de Santa Teresa, vida de clausura”.
Entrada actualizada el el 18 oct de 2021
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