Margarita Dittborn lleva 8 años de carrera en el terreno de las artes visuales, casi todos dedicados al fotomontaje digital, pero desde el año 2011 a la fecha, ha estado experimentando en nuevos formatos.
Pintura, cerámica, dibujo, tinta china, acuarela, etc, todo para dar un respiro momentáneo a su formato clásico: los fotomontajes digitales ( los que la han llevado a exponer en galerías, ferias internacionales de arte contemporáneo, museos y centros culturales en Barcelona, Basel, Bogotá, Bolivia, Brisbane, Buenos Aires, Dubai, Florida, Guanajuato, Hong Kong, Corea del Sur, Lima, Monterrey (México), Panamá, París, Santiago de Chile, Sao Paulo y Toronto).
"Llevo mucho tiempo con el fotomontaje digital. Y si bien mis trabajos estaban en un comienzo basados en la historia de la pintura como una forma de pintar sin hacerlo, ahora es bueno tener la valentía de lanzarse a la manualidad de frentón; con lápiz, con pincel. Y de pasar a...lo táctil: la pasta, el papel, los géneros, la tinta, etc. Tal vez este lenguaje es un retroceso en términos evolutivos de la historia de las imágenes, porque la pintura era la forma de representar antes de que lo fuera la fotografía. Sin embargo para mí significa un respiro experimentar con otros medios y eso es necesario en mi desarrollo como artista. No tengo idea de a dónde puede llevarme este nuevo trabajo, pero quiero hacerlo, es un deber salir de la zona de confort, aunque sea por un rato", dice la artista.
Cabe señalar que, pese a que estos nuevos trabajos son inéditos y experimentales para ella, la poética que gira en torno a su trabajo sigue siendo la misma: Mediante sus imágenes nos habla de histeria femenina, amor por la comida, dependencia emocional e idealización amorosa.
Margarita Dittborn agrega: "La intención de irse y de quedar en el mismo lugar" es tal como suena: quiero representar mediante otros formatos, una continuidad en cuánto al hilo conductor de mi trabajo".
Entrada actualizada el el 06 abr de 2015
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