La exposición, Laboratorio de formas. José María de Labra, presenta una completa selección de maquetas de celosías y frisos, dibujos y pizarras grabadas realizada por este autor, que revela numerosos aspectos inéditos de la obra de uno de los principales autores pertenecientes a la primera generación de artistas que trabajaron la abstracción geométrica y el constructivismo y que estuvo vinculado al movimiento del Arte Normativo de mediados del siglo XX.

La exposición dedicada a Labra (A Coruña, 1925-Palma de Mallorca, 1994), comisariada por Paula Barreiro (autora de los ensayos La abstracción geométrica en España -1957-1969- y Arte normativo español. Procesos y principios para la creación de un movimiento), es una producción del Museo Oteiza y de la Galería José de la Mano y muestra en el centro de Alzuza un conjunto de 55 obras realizadas entre 1955 y la década de los sesenta, ... que se podrán contemplar desde el 21 de marzo hasta el 26 de mayo de 2013.

Realizadas en madera, tratada o pintada, las maquetas de celosías y frisos reunidas en esta exposición son construcciones 'basadas en estructuras de repetición que muestran el trabajo del artista por la integración del arte y la arquitectura. Esta ambición integradora se encuadra dentro de la trayectoria artística de Labra, quien, desde finales de los cincuenta, formaba parte activa del movimiento de Arte Normativo, muy interesado en esta cuestión. El estudio del espacio y la fusión entre arte y funcionalidad llevaron a Labra a explorar, tanto el campo del diseño, como el arquitectónico, en colaboración con autores como Javier Feduchi, Javier Carvajal o Andrés Fernández- Albalat. Las celosías realizadas para el pabellón español de la Feria Mundial de Nueva York de 1964, Galerías Preciados (actual El Corte Inglés) de la calle Arapiles, en Madrid, o la R.D. Hípica de A Coruña manifiestan el trabajo cercano con el mundo arquitectónico', según explica la comisaria del proyecto.

Las estructuras seleccionadas en esta exposición son un elemento esencial para la comprensión del proceso creativo que llevó a la realización de las mencionadas obras arquitectónicas, reflejan el interés del artista por investigar las posibilidades de la forma y la estructura en el espacio arquitectónico y 'presentan un alfabeto de formas que le permitieron encontrar medios idóneos para la creación de ambientes y la separación de espacios, mediante la conjugación de llenos y vacíos, y luces y sombras', señala Barreiro. El papel de este laboratorio de formas experimental 'fue determinante en el proceso de sistematización formal que Labra, al igual que toda una nueva ola de artistas geométricos, emprendió en la segunda mitad de los años sesenta'.

Esta exposición se completa con una selección de dibujos realizados por el artista durante esos años, en los que muestra su voluntad de experimentación de la mancha y su comportamiento seriado en el espacio, así como algunas de sus singulares pizarras grabadas con formas geométricas, que se muestran por primera ocasión en el Museo Oteiza. Junto a estos elementos, la exposición se completa con numerosos referentes documentales vinculado a Labra, muchos de ellos procedentes del archivo personal de Jorge Oteiza que custodia su Museo, que recuerdan la relación personal que mantuvieron estos dos autores, así como su voluntad compartida por la experimentación, la utilización de los lenguajes geométricos, la integración de las diferentes artes en busca de la obra total y, en definitiva, la compresión de la capacidad simbólica del arte fundada en su conciencia estructural.

Este proyecto expositivo incluye la edición de una publicación homónima dedicada a la obra del autor, que incluye textos del propio Labra, de Paula Barreiro y de Gregorio Díaz Ereño, director del Museo Oteiza, así como una breve recopilación de textos sobre la obra del artista publicados en los años sesenta y setenta y firmados por Miguel Fernández Brasso, Eduardo Amann y Juan Ramírez de Lucas.