Doralice Souza recupera en la exposición Mèdousa uno de los seres marinos más bellos y etéreos, arcaicos y enigmáticos, para evocar con sutil elegancia el mito griego de la Gorgona. Las medusas se convierten en representación iconográfica de vida y muerte. De formas abstractas, la imagen de este animal marino desprende una expresividad y una energía atemporales. La primera parte de la muestra se caracteriza por composiciones de gran formato. Las figuras en azul y negro se integran en fondos difuminados, interpretando un mundo de misterio y reflexión. Con el uso de veladuras crea matices de luz y sombra, realzando volumen, perspectiva y movimiento. La sección Arte Urbano refleja otro tipo de medusas pintadas sobre madera y en un formato más íntimo. Presentan colores vivos y líneas sencillas. La paleta se enriquece para componer obras de intensa espontaneidad y frescura, evidenciando la versatilidad y la experiencia artística de Doralice Souza.