“Observad un día, no en uno de esos restaurantes de lujo, en los cuales la intervención arbitraria de los camareros y de los sommeliers destruyen mi poema, observad en una pequeña taberna popular, dos o tres comensales que han acabado de tomar café y están charlando. La mesa todavía está llena de vasos, botellas, platos, la aceitera, la sal, la pimienta, la servilleta y el servilletero, etc. Ved el orden fatal que pone todo esos objetos en relación los unos con los otros; todos han servido; han sido cogidos con la mano de uno o de otro de los comensales, las distancias que los separan son la medida de la vida. Es una composición arreglada; no hay ningún falso lugar, ni un hiatus, ni un engaño.” (Monteys & Pere, 2001)
Este fragmento del libro “Casa Collage” nos habla del espacio que hay entre los objetos, ese espacio que pasa desapercibido, que...no es importante. Este proyecto busca ver el espacio que rodea los objetos, imaginando el aire que los envuelve como una materia maciza, que se tiene que desplazar para que los objetos puedan ser.
Es interesante ver como podemos reticular y “ordenar” las actividades propias del hábitar, y así obtener unas medidas (x metros de hilo o x cm3 de aire). Esta idea de poder medir la vida es cautivadora en tanto es imposible, no podemos cuantificar ni pretender ordenar las acciones del habitar, ya que existen tantas formas de habitar como personas en el mundo.
Entrada actualizada el el 27 ago de 2019
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