Krum Stanoev y Milena Iordanova son dos artistas búlgaros afincados en España desde hace más de veinte años, país en el que han tenido a sus tres hijos. Milena, además, vivió parte de su infancia en Cuba. Sus vivencias personales en estos países de carácter latino han marcado su obra, dotándola de flexibilidad, fuerza y color. Mientras que Milena ha estado siempre enfocada hacia la pintura, Krum ha tenido una trayectoria artística más variada: desde la pintura, pasando por el grabado, hasta la escultura, que copa su producción artística de los últimos años.
Ambos se licenciaron en Bellas Artes en la prestigiosa Academia de Bellas Artes "Nicolai Pavlovich" en Sofía, lugar del que tienen un recuerdo agridulce por el ambiente academicista reinante en la época, lo que les trajo problemas a la hora de intentar plasmar su sentir artístico.
Milena aparenta ser una mujer dulce de carácter equilibrado pero tiene un torbellino...de sentimientos que guarda muy adentro, reflejo de su alma eslava. La pintura es la vía de escape de toda esta emotividad. Su obra está marcada por el movimiento, a veces tumultuoso, reflejo de su vorágine interior; por la ligereza en el trazo y la transparencia cosas ambas que remarcan esa sensación de realidad paralela nacida de un sueño agitado. Milena suele trabajar con técnica mixta, mezclando acrílico y acuarela que refuerzan esa impresión de de fuerza y delicadeza. El color es otra característica de su obra en la que predomina su gusto por la fuerza vital del amarillo. En esta serie de pequeñas estampas veraniegas se aprecia, gracias al color, una calidez y placidez propias de las perezosas tardes del estío. Y, como en las tranquilas tardes veraniegas, a veces estalla la tormenta... de sus obras emana una delicada sutileza superficial con una gran fuerza subyacente. Así es ella.
Krum es, de los dos, en quien más ha calado el carácter latino. Su personalidad se identifica más con él, por su carácter expansivo y temperamental. Al contrario que Milena, Krum usa su arte para contener, concentrar y reflexionar sobre todo lo que le importa y no quiere que se le escape. Milena es la fuerza centrífuga; Krum, la fuerza centrípeta. Su obra escultórica de los últimos años ha estado centrada en el metal cortado a láser con distintos acabados. Esta forma de trabajar el metal confiere a su obra una gran ligereza y le permite jugar con los contenidos dándole una densidad de significado que hace que percibamos su obra como un poema escultórico. Incluso sus esculturas de hojas muestran el interior, su esqueleto, su esencia, en suma. La serie que presenta aquí Krum sobre la figura humana es una muestra de esa reflexión, ese mirar hacia dentro; mostrar, pero no dejar escapar. Krum tiene una extraordinaria facilidad para el dibujo que le permite simplificar las figuras sin que pierdan nada de su fuerza. Al contrario, refuerza esa sensación quitando todo lo superfluo para radiografiar lo vital. Ideas flotando en una burbuja... Las Cosas Que Importan.
Inma Pancorbo
Octubre de 2014
Imágenes de la Exposición
Tormena 1 y 2. Milena Stefanova
Entrada actualizada el el 20 ene de 2015
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