La Directora General del Instituto Asturiano de la Mujer y Políticas de Juventud, Almudena Cueto, inaugurará el jueves 10 de enero de 2019 a las 19:30 horas, la exposición Geopolíticas del cuerpo. El territorio como piel de Miguel Braceli, Premio Asturias Joven de Artes Plásticas 2017, en la Sala Borrón de Oviedo.
Miguel Braceli (Valencia, Venezuela, 1983), ha desarrollado la práctica artística en diversos campos que abarcan el land art, la perfomance y el arte relacional, exponiendo en galerias, salones y bienales de arte en iberoamérica y Estados Unidos. La mayor parte de su trabajo se ha construido en obras efímeras de gran formato sobre el espacio público, realizando intervenciones en Argentina, Bolivia, Chile, Colombia, Costa Rica, Estados Unidos, España, Suecia y Venezuela.
Entre sus reconocimientos se encuentran el Premio de Arte Joven del Principado de Asturias 2017, el Premio de Arte Público de Extremadura Supertrama en el mismo año,...Premio “Artista Internacional 2017” y “Artista Emergente 2014”de la Asociación Internacional de Críticos de Arte; Premio del Salón Jóvenes con FIA/XVII Edición (2014), entre otros. Ha conducido numerosos proyectos de educación, organización y participación con distintas instituciones, tale como el MoMA, la Embajada Americana, Matadero Madrid y el Museo de Bellas Artes de Caracas. Actualmente reside y trabaja en Estados Unidos, mientras se encuentra realizando estudios de postgrado en Bellas Artes en Maryland InstuteCollege of Arts con una beca Fulbright.
En palabras de Virginia López, comisaria de la exposición:
“Miguel Braceli en los últimos cinco años ha desarrollado intervenciones artísticas ligadas a la práctica del site- specific / site-oriented, considerando el espacio como un organismo vivo y susceptible de activación. O mejor, convirtiendo lugares específicos y connotados históricamente, en espacios de creación y campos de posibilidad, donde la acción (tiempo, tránsito, movimiento) genera aperturas que resignifican el contexto.
Este tipo de activismo paisajístico practicado por Braceli, no reside tanto en el carácter participativo de sus proyectos -a través del cual se genera un cuerpo único colectivo-, cuanto en la capacidad para resignificar y emancipar nuestra mirada. La piel lejos de ser límite se convierte en porosa zona de contacto.
La exposición presenta una selección de sus últimas intervenciones en Bolivia (El fin del mar, 2017), Costa Rica (Irazú, 2016), España (Sacar el mar, 2016 -Gijón y Geopolíticas del cuerpo, 2017 -Villanueva de los Infantes) y Venezuela (Área, 2014). Una de las cuestiones siempre abiertas en relación a prácticas artísticas participativas o relacionales, de naturaleza efímera, es la transmisión, formalización y visibilidad fuera del tiempo y espacio en el que han sido realizadas. La huella que generan, el intercambio de saberes y experiencias que pasan a ser patrimonio de quienes las han experimentado y vivido, ¿cómo se pueden transmitir?, ¿qué tipo de material u objeto tangible pueden generar? En la sala se muestran algunos posibles caminos trazados por el artista: desde la fotografía documental de los procesos de trabajo, a las obras en vídeo (que no documentación y que podríamos imaginar como instalaciones vídeo de gran formato), pasando por la edición de libros de artista (a excepción del aquí presente Coreotopías, sus libros nacen de los mismos materiales empleados en las acciones manteniendo la escala 1:1) o la instalación ambiente, con la que el artista redibuja el espacio expositivo ofreciéndolo a la experiencia lúdica de nuestros cuerpos".
