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Cuando la maestra de quinto grado nos sentó juntas, decidió de manera involuntaria que con Agus íbamos a ser amigas para siempre. Sellamos nuestra amistad memorizando los animales que componen la fauna de la pampa húmeda.

Con el paso del tiempo crecimos, un poco al menos, avanzando siempre pero con la certeza de poder volver al origen. Porque es lo que hacemos: revisamos, buscamos un equilibrio, tratamos de rever las cosas a la luz de la nueva experiencia. Y formamos pequeños círculos sucesivos que nos hacen avanzar.

Cada uno de estos ciclos pasa inevitablemente por el caos y por el paisaje más florido. Pero lo bueno es que están en movimiento, de manera continua, dándonos la seguridad de que se puede construir ... desde los escombros.

Y así, contemplamos desde la ventana el patio, donde conviven una bañera y una parrilla abandonada, sabiendo que eso nos nutre para seguir adelante. Sabiendo también que en la pampa húmeda se pueden encontrar liebres, vizcachas, zorros, zorrinos, pumas, mulitas y peludos.por Mora Sánchez Viamonte