Las máscaras artísticas y rituales están inspiradas en los antiguos habitantes talaióticos menorquines. Son una invención libre del que podría ser el arte primitivo de estos pobladores de la isla de hace más de 3000 años. Los talaióticos creaban sus poblados y monumentos con las grandes piedras que encontraban por el campo. Enric Servera crea estos personajes, con aire primitivo, con materiales encontrados en la costa de Menorca. Están hechos con maderas, plásticos, restos de redes, cuerdas… todo desechos humanos actuales. A estas máscaras de inspiración de antigua civilización se le añade el término post- al utilizar materiales plásticos y otros residuos vertidos por la acción del hombre actual. Este hecho no deja de ser una manera de contribuir a la limpieza de la costa, reciclaje de material encontrado, ready-made y denuncia al problema de la contaminación marítima y del paisaje costero.