Berlín es posiblemente la ciudad europea que ha vivido el S XX con mayor intensidad. Pasando de capital de la música, la filosofía, el cine o el diseño a soñar con conquistar el mundo impulsada por el genocidio. Gobernada por los grandes extremismos políticos de nuestra era y también bastión del estado del bienestar y la libertad. Refugio de estrellas de rock a la fuga e impulsora de la austeridad europea. Unos días inmensamente rica y otros inmensamente pobre.
Nos cautivan las melodías hermosas que cuentan historias terribles y las voces terribles que cuentan historias maravillosas. Berlín ha sido bella y horrenda, cuento y pesadilla tantas veces al mismo tiempo que se ha convertido en la más europea de todas las ciudades.
Esta colección de fotografías busca las huellas que el paso del tiempo ha ido dejando en las paredes de Berlín. Unas superficies tan usadas que parecen contradecir la vitalidad de...sus habitantes, que buscan siempre un ahora y un mañana.
Nicolás Cancio (Tuilla, Asturias 1984) trabaja sobre todo la fotografía de calle y el retrato aunque no deja de lado el paisaje, en el que busca imágenes más reflexivas e intimistas. Su principal interés es el espacio donde la fotografía documental y creativa se solapan, contando las historias que se va encontrando desde un punto de vista personal, filtrado por su propia experiencia e interpretación estética.
Entrada actualizada el el 20 may de 2019
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