Paisajes interiores, universos paralelos. Fragmentos de paisajes de ensueño, evocaciones de universos paralelos llenos de misterios y sugerencias que a veces nos hacen reflexionar, pequeños personajes lejanos, que se desplazan y salen de las cuevas, atraídos por otros enigmáticos y extraños, hacia objetos y frutas desproporcionados a propósito para transmitir ideas, inquietudes y sentimientos. El arte debe despertar la imaginación, pero aquí también nos hace conscientes de nuestra responsabilidad, fragilidad y vulnerabilidad, nuestra ubicación en el universo que nos rodea. Para poner en perspectiva el hombre y su entorno, su lugar y relación con el mundo; superado por los objetos que ha fabricado o recolectado. ¿De dónde venimos, a dónde vamos, quien o que somos en este universo? Un elemento en el, ¿infinitamente grande o infinitamente pequeño? Donde cada uno tiene que encontrar su lugar.