Proyectos y Avalancha supone un cierto contrapeso a la anterior muestra de Xesús Vázquez en Cantabria, que realizada en la Biblioteca Central, con el título de Hinterland, reunió ocho años de creación. Atalayas, geografías y paisajes, -siempre entre reflexiones sobre nuestra civilización, la memoria y el propio hecho pictórico-, alimentan esta obra que forma parte de las grandes colecciones, fondos de museos y centros de arte.
Y si aquella muestra supuso una oportunidad para recorrer pinturas de gran formato, que desde el 2010 hasta 2018 había ido reuniendo, esta presenta obras prácticamente antagónicas por formato, siendo en todo caso piezas que se asocian a la evolución última de ciclos de largo aliento en la trayectoria del artista. Un autor que se entrega a las piezas de gran formato, con la misma convicción con la que realiza pequeñas acuarelas cargadas de algunas de sus iconografías habituales. Son en todo caso obras que...se asocian a la evolución última de ciclos una y otra vez revisitados en la trayectoria de Vázquez. Obra sobre papel realizada en el último año con algunos elementos referenciales comunes con los de Hinterland, y un repertorio icónico representativo del hacer del artista: las atalayas, el paisaje, las batallas, el viaje.
Pintura y poesía se yuxtaponen en la trayectoria de este creador de un universo especial, practicante de la abstracción y la figuración a un tiempo. Los intereses de este artista son casi inabarcables: desde la historia como línea continua de un escenario en el que los acontecimientos más terribles y recurrentes se desarrollan para transformarse en decorado de la existencia humana hasta el concepto de memoria, la literatura desde sus orígenes hasta nuestros días, la poesía contemporánea (Paul Celan, Ingeborg Bachmann, T. S. Eliot...), el arte, el mundo helénico y sus mitologías, las ideologías del siglo XX... es prácticamente imposible encontrar una definición para la práctica pictórica de Vázquez, además de injusto, puesto que sería un intento de esquematizar y reducir una obra llena de símbolos sutiles, que consigue atrapar al espectador como el espejo de Alicia, a través del que nos adentramos en un espacio-tiempo diferente, que hace referencia a nuestra memoria personal y colectiva a la vez.
Entrada actualizada el el 02 jul de 2020
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