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Bajo la denominación de 'Ropa tendida' se ofrece un trabajo creativo, desarrollado por Susana G. Romanos desde el año 2000, en el que se reflexiona sobre el hogar como espacio alienante y paradigma del exilio interior. Se trata, además, de una obra integrada por piezas que han acompañado a la artista en aquellos lugares por los que ha transitado a lo largo de estos últimos años: Valencia, Barcelona, La Haya, Groningen, Teruel, México y su localidad natal, Castejón (Navarra).

Susana G. Romanos es Licenciada en Bellas Artes por la Universidad Politécnica de Valencia; Máster en Gestión del Patrimonio Cultural por la Universidad de Zaragoza; Diploma de Estudios Avanzados de Doctorado (DEA) en el Depto. de Arte de la Universidad de Castilla-La ... Mancha; estudios de Composición de Música Electroacústica en el Conservatorio de Valencia. Ha sido mención de honor 'Art vs Design Award' por el Artists Wanted Group en Nueva York en 2009; seleccionada para la Muestra de Arte Injuve de 2001 y Beca European Young Artists' Pepinières en la disciplina de Instalación acústica, Gante (Bélgica) en 1999. En la actualidad trabaja como editora en Barcelona y sigue generando proyectos artísticos en los que la inconsciencia del no saber hacia dónde ir se mezcla con el uso del lenguaje como medio para destruir las adicciones humanas hacia los objetos que nos rodean. También es doctoranda en fase de tesis por el Departamento de Arte de la Universidad de Castilla-La Mancha y en su haber cuenta con distintos reconocimientos y exposiciones colectivas. Sus proyectos de investigación están siempre relacionados con el arte contemporáneo, en particular con el denominado arte sonoro.

SOBRE EL EXILIO INTERIOR

Según declara la propia artista, con esta obra pretende indagar 'sobre el exilio interior y las fobias que éste puede llegar a suscitar. Y dado que el mayor exilio interior se produce dentro del hogar, cualesquiera que sean sus estancias y su ubicación geográfica, la obra plantea y propone el concepto de las diferentes partes de una casa, como metáfora del hogar, del lugar en el que en un determinado momento se ubican nuestras pertenencias, abstrayéndolas y dotándolas de un significado preciso en cada etapa del exilio y de sus producidas fobias.

Este concepto de casa como lugar alienante, como espacio de transformación de la conciencia hacia un destino incierto, posee un punto débil o fuerte según quién lo observe y dónde lo observe: el tendedero. Entendiéndose éste como un espacio en el que nuestras intimidades, 'ropa tendida', quedan expuestas a la vista de, habitualmente, desconocidos, seres que de forma pasiva unas veces, activa otras, irrumpen en nuestra intimidad exiliada. El efecto de este suceso en la parte exiliada es imprevisible porque fuerza a un inevitable diálogo'.

Por todo ello, esta exposición de Susana G. Romanos es como un mostrarse al espectador a través de una serie de piezas que invitan a la reflexión sobre diversos hábitos y estereotipos de nuestra sociedad contemporánea.