La primera exposición individual de Andrés Izquierdo, ‘The kid with the mouth in the shape of a moon’, puede visitarse en Belmonte hasta el sábado 14 de enero. "Si me refiero a la necesidad de una formalidad, sería oportunista no hablar de la obra en sí. Andrés ha ido entendiéndose como productor y procesador de materia; consigue crear un espacio dentro de otro y que bien podría prescindir de cualquier contenedor, porque el espacio que existe entre su estanque, su flor y su ventana, podría estar inscrito tanto en un bosque como en un recuerdo. El viaje que Andrés emprende produce símbolos, así, esta exposición es otro viaje para nosotros a través de objetos físicos que a su misma vez pueden ser utilizados como elementos para un ritual. Un concepto a tener en cuenta es la dualidad y el eterno intercambio simbólico: la noche es necesaria para el día, la muerte lo es para la vida y el dolor le da más importancia a la felicidad." (Javier Aparicio)