Descripción de la Exposición
El trabajo de Mao Tongqiang (1960) es casi en sí mismo un objeto encontrado, cargado de semántica conceptual. La obra de Mao ha evolucionado sobre el camino del arte conceptual chino –del que es el mayor exponente- y del ready-made duchampiano. Su obra, sus objetos, poseen, en palabras de Ai Weiwei, un significado simbólico más allá de lo fáctico, y representan un pedazo de historia. Estos objetos no son un urinario al que se le otorga una condición, sino objetos abandonados que recuerdan lo que un día fueron. Mao Tongqiang apela al significado teorético de las cosas y en torno a su obra se crea una cierta atmósfera épica, una epopeya trágica de la historia china.
Trinidad, primera exposición individual del artista en España y comisariada por Ada Naval, crea un recorrido por el filo que separa la creación y la pérdida de identidad. Esta identidad es tratada como símbolo, como un nuevo ready-made que pasa a apelar directamente al ser humano, al espectador. Partiendo de tres puntos clave en la obra del artista chino: religión-espíritu, cuerpo-territorio y ser humano-vida, se desarrolla la problemática de una identidad colectiva que, en lo más íntimo, golpea la individual.
En Scriptures (2018) se enfrenta el problema del cristianismo que desembarcó en China con la apertura a los mercados capitalistas. Una nueva religión que ya no intentaba camuflar sus dogmas para concordar con el comunismo de Mao, y dejaba atrás la bandera de la igualdad social para ahondar en las diferencias de clase. Mientras aumentaba la conciencia de pertenecer a una clase, se daba rienda suelta a la pérdida de convicción religiosa en favor de la “religión fácil”. Y, entonces, ¿a qué Dios rezar? ¿Qué territorio nos queda? Porque si territorio es el lugar que poseemos, es también el lugar al que pertenecemos. Archives (2018) presenta archivos originales (sentencias y multas) generados durante la Campaña de Rectificación (1949-1979), que hoy recuerdan el lugar que estas personas ocuparon, su propio territorio: sus rostros (Acuarelas, 2018), su vida y su muerte. Después de todo ¿qué queda?, ¿cuál es el territorio que ocupa la memoria?
Esta pérdida individual del haber existido es tratada desde el prisma de lo colectivo y entonces, no es sólo un hombre quién desaparece, sino todos. Esta idea se plasma en The Order (2015), obra en la que Mao evoca una nueva Plaza de Tiananmén sin el Hombre del Tanque, para replantearse ya no lo más obvio -el uso público o privado de las armas- sino cómo los disparos, las balas que se hunden en los cuerpos, pueden llegar a agujerear también nuestra imagen. El símbolo que eran las biblias, los archivos, es ahora nuestra propia imagen cuyo reflejo constituye nuestra identidad más relativa. Este reflejo, el símbolo que en The Order se expone como nuestro, nace de las balas, y nos recuerda que los disparos solo pueden perforar lo que existe. No se puede asesinar a los muertos pero sí olvidarlos.
La pérdida es el último elemento de nuestra identidad. Si en la pérdida nace una nueva identidad, entonces una nueva identidad es también una nueva búsqueda. ¿Qué hay sino detrás de la perdida?
Formación. 08 may de 2025 - 17 may de 2025 / Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía (MNCARS) / Madrid, España