El pintor reflexiona sobre las posibles analogías que se dan entre la romería del Rocío y los grandes festivales de música, tomando como ejemplo el Festival Internacional de Benicassim.

Sirviéndose de un lenguaje no verbal, como es la pintura, Manuel León reflexiona en obras como 'La visa oro para hacer la raya' o 'Radiostesia romera', haciendo referencia al 'ser dual que asiste a este tipo de eventos'. Como el propio pintor explica 'toda esta reflexión, que tiene que ver más con la cultura popular y el folclore que con el arte, que se convierte en tema central de mis últimos trabajos; a modo de guión cinematográfico, ya que para mi el proceso pictórico tiene que ver más con el cine porque se desarrolla en el un tempo menos anecdótico y carece de frescura de ... otro tipo de formas de representación, como la fotografía. Así pues, ciertos símbolos de los EBPR (Evento Báquico Pseudo Religioso) se convierten en formas propias del lenguaje de la pintura, como son la huella del pincel y la agrupación de colores en una superficie plana.'