Mañana viernes 16 de octubre se inaugura en Porto Alegre (Brasil) la 7ºBienal de MERCOSUR, encuentro que congrega las propuestas más innovadoras del arte contemporáneo de esta región de América.

Esta cita cultural se ha convertido en una actividad clave dentro de las nuevas modalidades de producción artística, apostando a transgredir los moldes que acarrea el concepto mismo de Bienal.

Preparados para la apertura y familiarizándose con las dinámicas y sistemas de vida de la ciudad brasileña, los artistas chilenos destacan el desafío de crear obras específicas para esta bienal y el valor del intercambio entre artistas del continente.

Chile tiene nuevamente una presencia destacada en una de las citas del arte contemporáneo más influyentes del momento. Después ... del éxito del Pabellón Chileno y la obra de Iván Navarro en Venecia y luego de la curatoría de los chilenos nicoykatiushka en la Bienal 798 de Beijing, la Dirección de Asuntos Culturales de la Cancillería (DIRAC) continúa su estrategia de inserción del arte chileno en el mundo con la 7º Bienal de MERCOSUR, que tiene lugar entre el 16 de octubre y el 29 de noviembre en Porto Alegre (Brasil).

La organización de esta bienal eligió por un  concurso internacional al artista visual y curador chileno Camilo Yánez (1974) como el Curador General, compartiendo esta tarea con la argentina Victoria Noorthoorn. Ambos coordinaron un sistema de curatorías en diferentes ámbitos planteados por este encuentro, y todos los co-curadores son también artistas (entre ellos el chileno Mario Navarro), pues uno de los puntos importantes de esta versión es revalorizar al artista como un actor social y constante productor de sentido crítico.

Navarro no hace grandes diferencias entre este rol de co-curador y lo que es su obra propiamente tal: ?lo que hago es traspasar algunos elementos de obras o proyectos que he realizado a los conceptos generales de una curatoria ? dice ? en este caso, el ?Árbol Magnetico? repite ciertas directrices que tiene la obra que estoy mostrando actualmente en la I Trienal de Chile, el carácter de ?campos de fuerza?, elementos que se contraponen unos con otros o en un ámbito más formal, el título es el mismo aquí ý allá?.

La 7º Bienal de MERCOSUR se plantea más como un sistema que como un evento. La mayoría de sus actividades se focaliza en los procesos de creación, bajo el llamado Grito e Escuta, aludiendo a la Acción y Reflexión, que son herramientas fundamentales para estructurar un montaje artístico o una puesta en escena.

La 7º Bienal de MERCOSUR estará conformada de un proyecto Pedagógico, un Programa Editorial, y la participación de la Radio, ya que esta bienal plantea una concepción distinta de comunicación.

La numerosa comitiva de artistas chilenos ya tiene todo listo para la inauguración de mañana viernes, según Rodrigo Vergara, creador del proyecto Hoffmann's House: ?La bienal es una muy buena oportunidad de darle visibilidad al trabajo que venimos desarrollando y el poder trabajar con artistas de Porto Alegre siempre es una inyección de energía y un aliciente para cualquier carrera artística?. Por su parte el artista Diego Fernández, residente en Nueva York, recalca: ?Es muy positivo contar con el apoyo del gobierno de Lula, que nos ha permitido elaborar obras a un nivel muy profesional, toda la producción que hay tras la Bienal te permite concentrarte en tu trabajo?.

La artista Francisca García ya participó en ediciones anteriores y compara: ?En 1999 la organización era mucho más amateur, pues era la segunda bienal. Ahora se ve una diferencia en el tipo de obra, en la relación que debe haber entre una obra y otra, con una mirada curatorial más exhaustiva y con el desafío que tienen los artistas en cuanto a producir la obra in situ. Ya no funciona trasladar la obra y simplemente ponerla en este lugar. Ahora tampoco existe una representación nacional y por lo tanto los curadores, en este caso artistas-curadores, crean un guión y luego a los artistas. Cada galpón está a cargo de un artista-curador?, explica.

En tanto, Pablo Rivera (quien nos ha representado también en la Bienal de Sao Paulo) opina que: ?Lo principal es hacer obras que en otras condiciones no sería posible, tanto por presupuesto como por espacio. Y al mismo tiempo, poner en circulación esas obras con otras de artistas que pueden ser muy interesantes también, lo que permiten lecturas contrastadas?.

El envío de artistas chilenos concentrará su energía en el sistema-bienal, en las relaciones que se den con otros artistas y otros países. Los nombres que nos representarán son Diego Fernández, Francisca García, Ingrid Wildi, Pablo Rivera, Hoffmann House, Cristóbal Lehyt, el colectivo que integran Joaquín Cociña, Cristóbal León y Niles Atalah y Juan Downey, de quién se mostrarán dos obras, una de ellas ?Círculo de fuegos?, creada en 1979.

El curador Camilo Yánez explica:

?En esta bienal las obras no se entienden por si solas sino como sistema, porque precisamente se quiere romper con los moldes institucionales de exhibición de obras. La bienal se centra en los procesos, en las historias, pese a que habrá artistas tan importantes como John Cage, lo que importa aquí son las conexiones y  los modos de pensamientos que se utilizan para trabajar en el arte?.

A través de la producción de obra, conferencias y acciones, esta bienal planteará cómo reformular el quehacer artístico, temas como la recuperación del dibujo como primer espacio de traducción del pensamiento del artista; el diálogo con la ciudad; el valor de la puesta en escena; el humor y el absurdo como instrumentos de resistencia y libertad; y el arte como proyección de ideas, planificación, comunicación e imaginación son algunos de los temas que desarrolla esta bienal.

El título de la bienal Grito e Escuta refiere a la importancia de explorar la comunicación multidireccional: entre un mundo en conflicto y un artista que escucha y responde, entre un artista que produce sentido con la intención de que el mundo escuche.