Con Way Out West, Irwin explora la percepción del espacio y de la luz por parte del espectador, jugando con la textura, el ritmo y las relaciones cromáticas. La luz del tubo fluorescente no invade el espacio, sino que matiza la luz natural de las salas, envolviendo al público.

Como Michael Govan declaró en 1994: 'La obra de Irwin le sitúa en la frontera de diferentes disciplinas: paisajista, arquitecto, pensador de estética, todo ello de manera absolutamente coherente con su práctica como artista, en la que, entre otras cosas, cuestiona precisamente dónde se dibujan hoy en día los límites de la labor del artista'.

Esta es la segunda exposición de Robert Irwin en Madrid, cuya muestra retrospectiva en el Museo Reina Sofía en 1995 supuso su presentación en España.

La obra de Irwin ha sido objeto de más de sesenta exposiciones individuales desde los inicios de su carrera y está presente en colecciones de relevancia internacional, entre las que se incluye el Centre Georges Pompidou, París; The J. Paul Getty Museum, Los Ángeles; el Hirshhorn Museum and Sculpture Garden, de la Smithsonian Institution, Washington, D.C.; el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, The Museum of Modern Art, Nueva York; el Solomon R. Guggenheim Museum, Nueva York; y el Whitney Museum of American Art, Nueva York.

Robert Irwin ha realizado además numerosas instalaciones e intervenciones en el paisaje como en Villa Varese (col. Panza di Biumo), 1976; Museo de Arte Contemporáneo de San Diego, La Jolla California, 1995; Dia: Beacon Center for the Arts, 1999; Galería PaceWildenstein, Chelsea, Nueva York, 2000; Fundación Chinati, Texas, 2002; y el jardín de palmeras del Los Ángeles County Museum, California 2007; así como los jardines del J. Paul Getty Museum en Los Ángeles.