Álvaro Calvo-Villamañán García empieza en el mundo de la cerámica en la escuela de cerámica de Algete a finales del año 2013. Un año después monta su propio taller en Fuente el Saz del Jarama, en el que actualmente trabaja e imparte cursos y talleres. Alfarero autodidacta, se interesó por la cerámica sin esmaltar desde muy temprano en su carrera. Actualmente mantiene tres líneas de producción. Cerámica de estilos "Shino" y "Kohiki" con las que fabrica las piezas de mesa o uso común, así como la mayoría de sus encargos. A parte estaría su producción más "artística" o menos seriada, inspirada en la cerámica de Iga y Shigaraki. Todo ello cocido en uno de sus dos hornos túnel o "anagama".